Actualizado 26/04/2012 21:43

'Manila (1575-1898): Evolución Urbana y Modernidad' centra este viernes el 'Ciclo Ultramar'

CÁDIZ, 26 Abr. (EUROPA PRESS) -

EL arquitecto y exdirector del Instituto Cervantes de Manila, Javier Galván, protagoniza este viernes la décima conferencia del 'Ciclo Ultramar', organizado por el Consorcio para la Conmemoración del Bicentenario de la Constitución de 1812 y el Colegio Oficial de Arquitectos de Cádiz. Su disertación tendrá lugar a las 20,30 horas en la sede del Colegio de Arquitectos bajo el título 'Manila (1575-1898): Evolución Urbana y Modernidad'.

Según detalla el Consorcio del Bicentenario en un comunicado, este ciclo nació con la vocación de estudiar y analizar la estrecha vinculación marítima que, a través de Cádiz, se produjo entre la península y las provincias de ultramar. Una vinculación que se vería materializada en las diferentes ciudades de mar que representaban el punto de contacto de aquellos vastos territorios con la península en cuyas morfologías urbanas y arquitecturas se reflejaban estas influencias de ida y vuelta.

Galván explicará en su conferencia que con frecuencia la morfología, incluso el propio carácter de una ciudad vienen marcados por la naturaleza de su emplazamiento, y Manila es un claro ejemplo de ello. Su emplazamiento, visto con una óptica geoestratégica, era adecuado para su función política, como centro del archipiélago, y como cabecera de un patrón de comercio nuevo, de carácter intercontinental. Por otro lado, visto con una óptica topológica, ofrecía unas condiciones naturales que podían garantizar su defensa.

Siguiendo las disposiciones sobre creación de ciudades en el Nuevo Mundo, se impone en Manila una trama en retícula, que se adapta a las condiciones naturales del emplazamiento. El resultado acabará siendo un recinto en forma de pentágono irregular, amurallado (Intramuros) cuya forma perdurará en la trama urbana de Manila, hasta la actualidad.

Para el arquitecto madrileño, la importancia del carácter evangelizador de la colonización de Filipinas tuvo desde un primer momento su impronta en la trama urbana de Intramuros, en la que la presencia de las construcciones de las órdenes religiosas resultaba fundamental.

Por otro lado, otro de los aspectos que abordará este experto, es que la reconstrucción de sus edificios será una constante en la historia arquitectónica de Manila; ya que el fuego, los terremotos y también los tifones causarán sucesivamente la ruina de los mismos.

En el siglo XIX Manila desarrolla su expansión extramuros, cruzando su centro de gravedad a la otra orilla del Pásig: el barrio de Binondo se convierte en el centro comercial de la ciudad.