Ex delegado de Medio Ambiente dice que Marín Lara no puede manifestar ignorancia en lo aprobado en los Merinos

Actualizado: domingo, 18 octubre 2009 18:18

MÁLAGA, 18 Oct. (EUROPA PRESS) -

El ex delegado provincial de Medio Ambiente Ignacio Trillo aseguró hoy que el alcalde de Ronda (Málaga), Antonio Martín Lara, "no puede manifestar ignorancia en lo que aprobaba, ni tampoco escudarse en responsabilizar a técnicos municipales en relación con sus exculpaciones ante la justicia por el caso de 'Los Merinos'", tras declarar la pasada semana por esta causa en los juzgados rondeños.

Así, explicó que el proyecto de urbanización de Los Merinos "fue aprobado por el alcalde, abogado de profesión, contraviniendo la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) --carencia de viabilidad hídrica y transformación de suelos muy superior al previsto--, emitida por Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, así como informes de la Consejería de Obras Públicas, procedentes igualmente del ente autonómico".

"El alcalde de Ronda no puede afirmar la ignorancia de cuanto sucedía con este proyecto de urbanización, ya que encontrándose en exposición pública durante la primavera de 2006, a efecto de alegaciones, la Delegación de Medio Ambiente se personó por escrito en ese expediente para advertir mediante escrito que no habían sido considerados los contenidos de la citada Declaración Ambiental", apostilló en un comunicado.

Asimismo, recordó que en ese verano "la Consejería de Obras Públicas hizo llegar sus consideraciones a la Alcaldía de Ronda para que revocase la aprobación efectuada sobre el proyecto de urbanización de Los Merinos que, al no ser tenidas en cuenta por el Consistorio, obligaron al ente urbanístico autonómico a interponer ante los tribunales un contencioso-administrativo contra la aprobación definitiva de ese proyecto por parte del Ayuntamiento".

Trillo insistió en que el alcalde "no podía ignorar el claro posicionamiento del órgano con competencias exclusivas en agua y medio ambiente --la Junta de Andalucía--, contrario al proyecto Los Merinos por vulneración de estas normativas, cuando en agosto de 2006 se propuso la firma del convenio con la promotora para garantizar el recurso hídrico ni cuando en septiembre de 2006 procedió a la concesión de la licencia municipal".

"Es más, cuando en la primavera de 2006, les fueron hechas por escrito al Ayuntamiento de Ronda las advertencias de la Junta así como de la Cuenca Mediterránea Andaluza, continuó en la misma tónica durante el verano de 2006 con comportamientos totalmente negativos en cuanto al obligado acatamiento que correspondía al Consistorio", dijo Trillo, delegado de Medio Ambiente en ese periodo.

Del mismo modo, aseveró que "en las varias reuniones mantenidas por la Junta con el Ayuntamiento, en las que estaba presente su alcalde o concejal de Urbanismo, con los responsables técnicos y políticos, tanto de la Delegación de Medio Ambiente como de la Cuenca Mediterránea de la Agencia Andaluza del Agua, se le comunicó que el único órgano competente en materia de aguas no era otro que la Agencia Andaluza del Agua y no podía un técnico municipal o su propio Ayuntamiento certificar o estimar que los recursos hídricos existentes en la zona fueran suficientes".

En este punto, manifestó que "se puso en conocimiento del señor Marín Lara que los informes emitidos por la Agencia Andaluza del Agua, que fueron trasladados al Ayuntamiento y de los que él debía de tener conocimiento, consideraban incompatibles la asignación de caudales que solicitó la promotora de Los Merinos, Club de Campo y Golf de Ronda S.L., con el Plan Hidrológico de la Cuenca Sur".

SUPERFICIE

Respecto a la discrepancia sobre la superficie a transformar, Trillo apuntó que "desde la Consejería de Medio Ambiente, mostrándole los datos calculados por la propia Junta de lo que el Ayuntamiento planteaba, se le insistió en que no era así, ni desde una perspectiva cuantitativa y mucho menos la ambiental".

Señaló que en la DIA de este complejo, que prevé 800 viviendas, dos campos de golf y un hotel de cinco estrellas, se exigía que la superficie de suelo a transformarse por las distintas actuaciones, ante los especiales valores naturales de la zona, tuviera como límite el 25 por ciento de la extensión total. "Una exigencia incumplida ya que el proyecto de urbanización, aprobado por el Ayuntamiento y firmado por el señor Martín Lara, supone la transformación del 69 por ciento del terreno", apuntó.

"También se le advirtió de las consecuencias que podrían reportar el inicio de las obras contra esos informes de la Junta, ya que si el proyecto se declarase por los tribunales de justicia como ilegal, aparte del quebranto económico que representarían las infraestructuras creadas y casas construidas o a medio edificar, que habrían de demolerse, los daños a los recursos naturales serían muchos más cuantiosos, irreversibles y de imposible reparación", recordó el ex delegado de Medio Ambiente.