MÁLAGA, 3 Ago. (EUROPA PRESS) -
El incendio producido el pasado viernes en Casares (Málaga), que afectó a 15 hectáreas de matorral y pasto, se originó cuando una chispa desprendida de un cable de la red eléctrica que suministra al municipio prendió en la vegetación circundante, entre la que estaba un almendro que rozaba los cables a causa de los fuertes vientos. Asimismo, la toma de tierra estaba situada en un lugar donde existe una vegetación seca.
Tras las investigaciones y las pruebas periciales, la Brigada de Investigación (BIIF) de los Agentes de Medio Ambiente de la Junta han concluido que en este siniestro convergieron varios factores para alimentar el fuego, ya que a los fuertes vientos, la escasa humedad y las elevadas y anormales temperaturas, hay que añadir que Casares estaba en fiestas y, en ese sentido, se produjo una sobrecarga de la propia red eléctrica por la que se originó el incendio.
Según informaron desde la Delegación Provincial de Medio Ambiente una vez que se ha esclarecido la causa, se procederá a la apertura de un expediente informativo a la empresa de cuya titularidad depende la red eléctrica, además de instársele a que a la mayor brevedad posible limpie de vegetación la zona contiguas a sus instalaciones, como exige la normativa vigente, con objeto de evitar futuros incendios.
Asimismo, la Brigada de Investigación pudo constatar que en el preciso momento en que se produjo el inicio del incendio, tuvo lugar un apagón en las zonas de población suministradas por esa línea eléctrica, según señalaron desde el Gobierno andaluz, a través de un comunicado.
El incendio, ocurrido en una zona rocosa cercana al cementerio de Casares, se inició a las 17.45 del viernes, fue estabilizado a las 21.50 y controlado a las 24.00 horas. Para su extinción, el Infoca trasladó a la zona cinco técnicos y agentes, 46 especialistas, dos vehículos autobomba y un equipo sanitarios.
En cuanto a los medios aéreos, por parte de la Consejería de Medio Ambiente fueron movilizados dos aviones de carga en tierra, un avión de vigilancia y coordinación, cuatro helicópteros de transporte y extinción y dos helicópteros de gran capacidad.
Por parte del Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino se trasladaron dos aviones anfibio y un helicóptero de gran capacidad. Igualmente se desplazó hasta la zona una Unidad Militar de Emergencias (UME).
En lo que respecta a los otros dos incendios pendientes de hacer pública su causalidad, como son los de Cortes de la Frontera y Jimera de Líbar, el delegado de Medio Ambiente, Ignacio Trillo, manifestó que "se está ultimando la conclusión del origen de los mismos y que en próximas horas se conocerán sus causas".
Así, recordó que "en el día de ayer se aclararon tanto el conato de Casarabonela, que motivó la puesta a disposición judicial del detenido numero 27 por negligencia de quema de restos de poda sin autorización, como el incendio de Benaoján, cuyo inició surgió en condiciones extremas de baja humedad, temperaturas y vientos".
