MÁLAGA, 6 Sep. (EUROPA PRESS) -
Los grupos de la oposición en la Diputación, PSOE e IU, han criticado al equipo de gobierno del PP por el inicio en sus entidades públicas, la Sociedad de Planificación y Desarrollo (Sopde) y la Empresa Provincial para la Vivienda de Málaga (Emprovima), de sendos Expediente de Regulación de Empleo (ERE), ya que supone comenzar su "desmantelamiento".
Tras acordar los consejos de administración de ambas sociedades el inicio de sendos ERE, el portavoz socialista, Francisco Conejo, ha acusado al PP de dar "el golpe de gracia a los instrumentos que tiene para fomentar el desarrollo de los pueblos", así como de iniciar "el mayor proceso de despidos en la historia reciente de la institución".
"Mientras el presidente, Elías Bendodo, se pasea por Argentina --donde se encuentra para apoyar la candidatura olímpica de Madrid 2020--, su Gobierno se carga la asistencia a los municipios y las políticas de vivienda", ha advertido.
Para Conejo, "éste es el futuro modelo local del Gobierno de Mariano Rajoy; no es mejorar la administración, sino despedir trabajadores y eliminar servicios, en este caso, a los pequeños y medianos municipios". "Bendodo es un alumno aventajado de Rajoy", ha apostillado.
En el caso de Emprovima, ha añadido, se ha aprobado en su consejo de administración "tomar las medidas oportunas", y en la Sopde, "se ha facultado a su gerente para que inicie las acciones convenientes para el despido colectivo de al menos el 30 por ciento de la plantilla".
En cifras, el recorte de personal en esta sociedad representa 1,3 millones, "con lo que, además de mandar al paro a trabajadores, se recortarán los sueldos y las condiciones laborales", ha agregado en un comunicado Conejo.
"El déficit argumentado se crea precisamente porque Bendodo ha rebajado las aportaciones de la Diputación a las empresas para dejarlas en una asfixia financiera que justifique el despido de la plantilla", ha comentado, opinando que "cuando Bendodo habla de déficit es la consecuencia del recorte que él mismo ha ejecutado, es una trampa para justificar el desmantelamiento".
Ha hecho hincapié en que "el PP desmantela dos políticas fundamentales en este momento: el apoyo a los municipios para el desarrollo económico y las políticas de vivienda pública". "Si algún servicio tiene que prestar la Diputación es la asistencia técnica a los pequeños pueblos", ha manifestado.
El representante socialista ha denunciado, por tanto, que "el Partido Popular haya votado en contra de que la Diputación alivie el déficit de la Sopde mediante transferencias o que garantice el servicio asumiéndolo la Diputación".
"Creemos que hay alternativas para no perder la prestación del servicio, mantener el empleo público y reorientar la política de la empresa en estos momentos", ha declarado Conejo, quien ha lamentado que "durante estos últimos meses Bendodo ha estado alardeando de que garantizaba la estabilidad laboral".
A su juicio, "si Bendodo dejara de despilfarrar en gastos de personal de confianza, pagar másteres a sus vicepresidentes, destinar grandes presupuestos a proyectos innecesarios como el Museo Taurino o si dejara de duplicar servicios con oficinas de alcaldes, la Diputación podría ofrecer servicios de calidad y no mandar a la cola del paro a decenas de profesionales en toda la provincia".
"Lo que han aprobado hoy se une al cierre de la escuela de enfermería, de la residencia de mayores de Colmenar, de la guardería laboral, del centro básico de acogida de menores, etcétera", ha concluido.
IZQUIERDA UNIDA
Por su parte, la portavoz de Izquierda Unida, Antonia Morillas, ha insistido en sus críticas al equipo de gobierno del PP de querer desmantelar estas dos empresas públicas.
Además, Morillas, quien ha dicho no entender "cómo Bendodo se marcha a Buenos Aires justo en estos días", ha resaltado que "estas sociedades se encuentran en una situación económica complicada porque por parte del PP ha habido una voluntad expresa de desmantelarlas desde el principio de la legislatura".
La diputada de la coalición ha indicado que Emprovima ha visto cómo se ha reducido en los últimos años un 95 por ciento su volumen de negocio, mientras que ha sufrido una bajada del coste laboral del 17 por ciento.
