El IAM confirma que no había denuncias previas por maltrato
TOLOX (MÁLAGA), 4 Ago. (EUROPA PRESS) -
El Ayuntamiento de Tolox (Málaga) decidió hoy, durante un pleno extraordinario, declarar tres días de luto tras la muerte de A.E.E.V., la mujer de 66 años que, presuntamente, fue apuñalada ayer por su marido, M.V.C., de 71 años, el cual acabó quitándose la vida.
También esta mañana más de 400 personas se concentraron ante las puertas del Consistorio para mostrar su "repulsa contra la violencia de género" y guardaron cinco minutos de silencio en recuerdo de esta mujer, según indicó el alcalde de Tolox, Juan Vera. De igual modo, la romería de San Roque, cuya celebración estaba prevista para el próximo sábado, ha sido suspendida.
Los vecinos, según explicó a Europa Press el regidor, comentaban que el matrimonio "había tenido varias discusiones, algunas con un tono más elevado", a lo que añadió que "la familia también tenía problemas económicos", aunque, como reconoció, "nadie se esperaba que llegara hasta estos extremos".
"Nada hacía presagiar lo que ha ocurrido", subrayó el primer edil, quien aseguró que el pueblo todavía "no termina de asimilar lo sucedido". "No entendemos lo que ha pasado por la mente de esta persona para hacer la barbaridad que ha cometido", lamentó.
La mujer, que fue encontrada en su casa, ubicada en la calle Villa Baja, en pleno casco urbano, presentaba una herida de arma blanca en el cuello, mientras que el hombre apareció ahorcado.
INSTITUTO ANDALUZ DE LA MUJER
Por su parte, la coordinadora del Instituto Andaluz de la Mujer (IAM) en Málaga, Pilar Oriente, lamentó este suceso y confirmó que no se conocen denuncias previas por maltrato, no existiendo, por tanto, orden de protección ni de alejamiento. No obstante, apuntó que el entorno de la víctima parecía que sí conocía que había una situación de violencia de género.
Oriente hizo hincapié en que en los núcleos de población pequeños "es difícil guardar el anonimato a la hora de denunciar, ya que todo el mundo te conoce". "El problema --declaró-- es que en este tipo de delito la víctima se siente avergonzada, no quiere hacer daño a su familia y se siente culpable".
"La mujer está como apresada psicológicamente y le cuesta más dar el paso y mucho más si está en un entorno en el que todo el mundo la conoce", manifestó a Europa Press la responsable provincial del IAM.
Aseveró que "el detonante de un agresor puede ser cualquier cosa; en la violencia de género, el hombre domina la situación y controla y posee a la otra persona y se cree en el derecho de poder quitarle la vida".
Oriente advirtió de que el hecho de que el agresor se quite la vida después "incrementa la dificultad para terminar con estos delitos, ya que si hace esto para no enfrentarse a su propia familia y a la sociedad, significa que sólo las medidas penales no podrán acabar con el problema", siendo necesario incidir en "la prevención y la educación para que se produzca un cambio de mentalidad en la sociedad".
Esta muerte por violencia de género se convierte en la segunda que se produce en la provincia de Málaga en menos de una semana, después de que el pasado 28 de julio un hombre asesinara presuntamente a su mujer en Ronda, tras lo que terminó con la suya.
