El presidente del organismo niega que se haya "tirado agua al mar" y dice que las avenidas son "necesarias" medioambientalmente
SEVILLA, 9 Feb. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG), Pedro Rodríguez Cantero, rechazó hoy la construcción de nuevos grandes embalses en la demarcación hidrográfica ya que, según aseguró, esto supondría "importantes impactos ambientales y el desalojo de las poblaciones de ciudades como Córdoba y Sevilla".
Así, Rodríguez Cantero afirmó durante un desayuno informativo que los embalses de gran envergadura que son técnica, económica y medioambientalmente viables en la cuenca "ya se han construido o están a punto de serlo, como es el caso de las presas de Melonares, Arenoso y la Breña II. Con ellos, aseguró, se alcanzará la regulación "adecuada" de la Demarcación, que está establecida en un 45 por ciento.
No obstante, apuntó que sí cabe la posibilidad de que se construyen pequeños embalses, con una capacidad por debajo de los 100 hectómetros cúbicos, en la cabecera de la demarcación para mejorar el abastecimiento y la laminación de inundaciones, como por ejemplo, en San Calisto en el río Genil, aguas arriba del municipio sevillano de Écija, para consolidar la defensa de avenidas de la localidad.
De este modo, el jefe de la Oficina de Planificación Hidrológica de la CHG, Agustín Argüelles, afirmó que el nivel de regulación actual de la cuenca, de un 45 por ciento, es "muy adecuado para mantener los caudales ecológicos y los ríos con vida" y que aumentar su capacidad supondría tener que soltar agua de los embalses y provocar avenidas periódicamente, cuando ahora el Guadalquivir lo hace de forma "natural" como ha ocurrido este año.
Asimismo, resaltó que el Guadalquivir es "muy diferente" al resto de los grandes ríos atlánticos como, por ejemplo, el Tajo que posee un gran embalse en su cabecera que permite una regulación integral del mismo, algo "imposible" de acometer en el primero, que posee, tal y como afirmó, "muchos más embalses" que el resto de ríos de sus mismas características, con un total de 60, todos, excepto el Tranco, situados en sus afluentes.
MÁS DE 2.000 HM3 POR LAS LLUVIAS
Por otro lado, Rodríguez Cantero informó que durante este último mes de lluvias por el río Guadalquivir han pasado más de 2.000 hectómetros cúbicos de agua, alcanzando los pantanos de la cuenca más del 70 por ciento de su capacidad, con unos 5.800 hectómetros cúbicos embalsados y, por tanto, la situación de normalidad, lo que garantiza el abastecimiento para consumo humano para tres años y para regadío para un periodo similar.
Respecto a las inundaciones que se han producido por el temporal, el presidente de la CHG explicó que éstas se han producido bien por la suciedad de los cauces o por la invasión de los mismos por edificaciones ilegales, algo a lo que, aseguró, se hará frente en la Planificación Hidrológica de la Demarcación del Guadalquivir cuya elaboración se encuentra en curso.
Rodríguez Cantero rechazó la idea de que se haya "tirado" agua al mar para aliviar la sobrecarga de los embalses, insistiendo en las avenidas son "absolutamente necesarias" para la conservación de los ecosistemas fluviales y la aportación de nutrientes al mar. Así, afirmó que si no se hubiera desembalsado agua del pantano del Jándula, en la provincia de Jaén, las inundaciones producidas en Andújar y Montoro "hubieran sido mucho más graves".
Avanzó que en el futuro Plan Hidrológico está prevista la elaboración de una cartografía de las zonas inundables en la cuenca del Guadalquivir que identificará las puntos de riesgo en la que ya trabaja el Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino (MARM).
