El acusado de apuñalar a un hombre en un pub de Ibros niega ser el autor

El acusado durante el juicio
EUROPA PRESS
Actualizado: lunes, 25 abril 2016 14:36

JAÉN, 25 Abr. (EUROPA PRESS) -

Pedro Juan C.C., acusado de matar a un hombre en una discusión a la salida de un pub de Ibros (Jaén) en febrero de 2015 ha rechazado ser el autor de la herida de arma blanca que costó la vida a otro vecino del mismo municipio, de 41 años.

"Yo no lo he apuñalado y no se quién lo habrá apuñalado", ha dicho Pedro Juan C.C. en la declaración que ha prestado ante el jurado encargado de juzgar este caso en la Sección Tercera de la Audiencia de Jaén.

El acusado ha sostenido durante su declaración que la noche en la que ocurrieron los hechos fue el fallecido acompañado por otras dos personas las que empezaron a hostigarle cuando él se encontraba "tranquilamente" jugando a las tragaperras en un bar de Ibros.

Ha añadido que estas tres personas le quitaron el móvil y parte del dinero, que llevaba encima y que ha cifrado en el juicio en unos 2.800 euros. Finalmente, según ha declarado el acusado, a la puerta del bar logró recuperar su móvil.

"A mí me dieron mi móvil y me despedí amigablemente", ha dicho Pedro Juan y ha añadido que posteriormente él siguió por otros bares del municipio donde, siempre según el acusado, "me persiguieron y se siguieron metiendo conmigo" hasta que finalmente hubo una pelea.

"Yo salí corriendo y no vi a nadie apuñalar a nadie. Me enteré que había una persona apuñalada cuando la Guardia Civil vino a buscarme y me lo dijo", ha declarado Pedro Juan C.C.

Ha añadido que él era "conocido" de la víctima y que pese a lo ocurrido esa noche, "por fraternidad" el no hubiera podido matar. Asimismo, ha negado que ante el juez o ante la Guardia Civil, hubiera declarado haber sido el autor. "Nunca he dicho eso porque yo no he prestado declaración", ha dicho el acusado.

Ha sido el dueño del pub el que en condición de testigo ha declarado que fue el acusado el que tras pelearse en el interior y echarle del local, el acusado volvió a los pocos minutos "con una tijera y una especie de navaja" y en la puerta del local "le propinó el navajazo" de forma "sorpresiva" y "sin que nadie pudiera hacer nada porque nadie se lo esperaba".

Todos los testigos han declarado que el enfrentamiento lo tuvo el acusado con el hermano de la víctima, pero que finalmente el que se llevó la peor parte fue la víctima porque fue a la que se encontró en la puerta cuando regresó armado.

La víctima se quedó de pie tras recibir la puñalada ya que solo presentaba un pequeño orificio que algunos han descrito como "la picadura de un mosquito" sin que en un primer momento se percataran de la gravedad que tenía y que acabaría costándole la vida.

El Ministerio Público le reclama inicialmente 18 años de prisión como autor de un delito de asesinato. Además, Fiscalía le reclama en concepto de responsabilidad civil una indemnización de 150.000 euros para la esposa del fallecido y su hija menor de edad.

Los hechos, según relata el Ministerio Fiscal en su escrito de calificación al que ha accedido Europa Press, los hechos sucedieron el 8 de febrero de 2015, cuando el acusado mantuvo una discusión con el hermano del fallecido en un bar de Ibros.

A raíz de dicha discusión tuvieron que intervenir varias personas para evitar un altercado entre ambos y que se siguió gestando en los siguientes locales por los que fueron pasando y coincidiendo. Finalmente, en el exterior de uno de los locales, según el fiscal, el acusado "se dirigió de modo inopinado esgrimiendo una navaja de unos 10 centímetros de longitud con la que sin mediar palabra apuñaló a éste en el pecho".

Sin embargo, el arma nunca fue localizada y la autopsia solo apuntó a un objeto punzante de unos diez centímetros con punta roma que podría haber sido compatible hasta con un bolígrafo.

Dicha arma le causó lesiones consistentes en herida incisa en región torácica izquierda que provocó una herida en la aurícula izquierda del corazón.

El herido, de 41 años, fue trasladado con vida al hospital San Juan de la Cruz de Úbeda, donde falleció mientras era intervenido quirúrgicamente.

La acusación particular eleva su petición de penas a los veinte años de prisión por un delito de asesinato e indemnización por responsabilidad civil de 300.000 euros para la mujer e hija del fallecido.

Por su parte, la defensa del acusado ha abogado por la libre absolución por entender que no fue Pedro Juan el autor de la herida de arma blanca. No obstante y como alternativa, pide la imposición de un año de prisión por un delito de homicidio por imprudencia grave con el atenuante de consumo de drogas y de legítima defensa.