El agua en las nueve zonas naturales autorizadas para el baño en la provincia continúa en buenas condiciones

Actualizado: jueves, 20 agosto 2015 18:57

JAÉN, 20 Ago. (EUROPA PRESS) -

El agua de las nueve zonas naturales de la provincia de Jaén autorizadas para el baño "mantienen unas buenas condiciones higiénico-sanitarias", porque no existen ningún tipo de contaminación que perjudique a la salud, según los análisis correspondientes a la primera quincena de agosto llevados a cabo por los técnicos del sistema sanitario público andaluz.

Esta actuación, al igual que en años anteriores, sirve para comprobar si el agua cumple los parámetros exigidos por la legislación actual para que no suponga ningún tipo de riesgo de cara a la población, además de evaluar su calidad higiénica. En total, según ha informado la Junta, serán 45 las visitas de inspección que se realizarán cada 15 días durante este verano en estas zonas recreativas.

La finalidad de este programa, incluido en el Plan Salud y Verano-2015 de la sanidad pública andaluza, es la vigilancia y control de la situación sanitaria y ambiental de la zonas de baño de la costa interior jiennense, una de las más amplias de España, que se encuentran en la mayoría de los casos dentro de sus cuatro parques naturales protegidos y en el río Guadalquivir o sus afluentes.

Las nueve áreas autorizadas para el baño en los ríos y pantanos de la provincia de Jaén son el embalse del Encinarejo y el río Jándula, en el término municipal de Andújar; el embalse del Rumblar, en Baños de la Encina; el río Linarejos y el Puente de las Herrerías, en Cazorla; el arroyo Los Molinos, en Siles; el río Aguascebas, en Villacarrillo; el Charco de la Pringue, en Villanueva del Arzobispo; y el Charco de la Cuna, en Santiago-Pontones.

Los técnicos del sistema sanitario público andaluz toman muestras en cada una de estos parajes para comprobar, entre otros parámetros, la transparencia y el color del agua a un metro de profundidad. También analizan la presencia de aceites minerales, residuos alquitranados, cristal, plásticos, madera, caucho, algas en descomposición o cualquier otro organismo que pueda afectar a la salubridad.

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