SEVILLA 28 May. (EUROPA PRESS) -
El servicio de estudios de BBVA estima que el aumento del PIB de Andalucía en 2025 podría alcanzar el 3,0%, por encima del 2,8% nacional, y el 1,6% en 2026 con una inflación que se acercaría al 2% gracias a la caída en el precio del combustible. De cumplirse estas previsiones, en 2026 la tasa de paro podría reducirse hasta el 14,2% de media en 2026 y se podrían crear 153.000 nuevos empleos en el bienio 2025-2026.
Según el informe 'Situación Andalucía 2025' de BBVA Research, trasladado en un comunicado por el banco y presentado este miércoles por Miguel Cardoso, economista jefe de BBVA Research para España, y por Francisco Javier Jerez, director de la territorial sur de BBVA en España, la economía andaluza arranca este año con un crecimiento mayor que el de España, impulsado por la recuperación de la actividad agraria, y gracias al avance de la demanda interna.
Sin embargo, hacia delante, se prevé una desaceleración debido a un menor impulso del consumo, la débil recuperación en Europa, una elevada incertidumbre en la política económica y la expectativa del impacto de las políticas arancelarias para España y los países de origen del turismo.
Tras el "fortísimo crecimiento" experimentado a finales de 2023 y principios de 2024, espoleado por el impulso del sector público y del comercio, transporte y hostelería y la progresiva normalización de la situación climatológica, BBVA ha indicado que la incertidumbre y el freno de las economías europeas explican un crecimiento algo menos dinámico en los trimestres siguientes. En este contexto, el PIB de Andalucía habría crecido un 0,8% en el cuarto trimestre de 2024 y un 0,7% en el primero de 2025, ligeramente por encima de la media nacional.
La inmigración está contribuyendo al aumento de la población activa y el empleo. Entre 2021 y 2024, los inmigrantes han cubierto un 29% de los 310.000 empleos creados en Andalucía (45% en España). Este comportamiento, ha explicado BBVA, supone continuar con el comportamiento observado ya antes de la pandemia, aunque Andalucía se sitúa entre las regiones donde la mano de obra extranjera está contribuyendo menos al crecimiento del empleo.
Después del fuerte avance en 2023, el gasto con tarjetas de extranjeros en TPV de BBVA aumentó un 20% de media en el conjunto de 2024 (17% en el conjunto de España). En los cuatro primeros meses de 2025, el gasto turístico creció un 13,5% (11% en España). Aunque aún es pronto, la tendencia apunta a que la contribución del turismo al crecimiento del PIB regional debería ser, este año, menos intensa que en 2024.
En cuanto a las exportaciones de bienes andaluzas, tras el repunte registrado en 2024 (+3,4% interanual), en lo que va de año las ventas al exterior moderaron su avance hasta el 0,7% (España 2,6%), por el retroceso de los bienes de equipo y las exportaciones hacia la Eurozona.
Sin embargo, las exportaciones de alimentos siguen evolucionando de forma favorable. En términos nominales, las ventas al exterior superan en los primeros tres meses de 2025 en un 25% las de 2019 (32% en España); sin embargo, en términos reales, estas se sitúan aún un 10,8% por debajo del nivel alcanzado pre-pandemia (-2,7% en España).
LA RECUPERACIÓN CONTINUARÁ DURANTE LOS PRÓXIMOS MESES
BBVA Research prevé que el PIB de Andalucía aumente un 1,6% en 2026. El crecimiento continuará apoyado en parte en el turismo, gracias al elevado aumento de la productividad que ha tenido lugar en los servicios y a la capacidad de crear empleo. Además, la reversión de los efectos de la sequía beneficiará a la actividad agraria y a las exportaciones.
Se espera que la inflación se acerque hacia el 2%, gracias a la caída en el precio del combustible, "lo que permitirá que los salarios vayan recuperando poder adquisitivo y que la reducción de los tipos de interés continúe, impulsando el consumo y la inversión", señala BBVA.
Aunque los efectos de la sequía aún se dejan sentir en el empleo agrario, "su intensidad es menor que en años anteriores". En lo que va de 2025, la afiliación en el sector agrícola habría caído un 0,2% respecto al mismo periodo de 2024, una contracción más moderada que la del año pasado y que contrasta con la evolución más negativa observada en otras regiones.
La política fiscal está siendo más expansiva de lo previsto. Hasta marzo de 2025, se han licitado contratos ligados al NGEU y se han concedido subvenciones con ejecución en Andalucía por valor de 5.530 millones de euros, equivalentes a un 2,6% del PIB regional de 2024 (para el conjunto de España, el importe alcanza el 3,0% del PIB).
La recuperación de la actividad en las zonas más afectadas por las inundaciones de la DANA en la Comunitat Valenciana ha sido más intensa de lo que se esperaba en un principio, posiblemente gracias a las ayudas recibidas. La caída del empleo tras la DANA fue menos significativa y su recuperación más rápida que lo estimado a partir de desastres previos. Esto podría "traducirse en un mayor crecimiento de la demanda en comunidades con relaciones comerciales más cercanas".
SE ESPERA UNA DESACELERACIÓN DE LA ACTIVIDAD HACIA 2026
Según BBVA Research, las perspectivas están condicionadas por un entorno especialmente incierto y dependiente del contexto global. La economía andaluza se encuentra entre las más expuestas a un posible aumento de aranceles por parte de EE.UU., y también preocupa el impacto indirecto a través del canal financiero, la mayor incertidumbre en política económica y las posibles repercusiones sobre las economías que consumen bienes y servicios andaluces.
El turismo enfrenta las dudas relacionadas con el estancamiento de la demanda europea. Sin embargo, varios factores podrían revertir esta tendencia. En particular, los cambios en la política fiscal alemana suponen un sesgo al alza sobre el crecimiento de la eurozona durante los próximos años. Asimismo, la reducción en el coste del combustible apoyaría las ganancias de competitividad, ha indicado la entidad.
La falta de inversión, particularmente en el mercado de la vivienda, supone un cuello de botella al crecimiento, en particular en las áreas urbanas. El incremento de los costes laborales "puede ralentizar la creación de empleo". Según BBVA, acelerar el crecimiento de la productividad será clave para sostener la actividad, en un contexto de incremento de los salarios, aumento de las cotizaciones a la Seguridad Social y de los costes no salariales, "particularmente si se confirman los cambios en la jornada laboral". Esto será "prioritario para las pequeñas empresas.
Ha aseverado que la consolidación fiscal en España será significativa y simultánea a la de otros países como Francia e Italia, socios comerciales importantes. Las finanzas autonómicas en Andalucía "están en mejor situación para enfrentar este reto, pero aún hay incertidumbre sobre cuál será su contribución a la disminución de los desequilibrios". En este contexto, BBVA abunda que el acuerdo para que el Estado absorba parte de la deuda de los gobiernos regionales debería ir acompañado de una reforma de la financiación autonómica, de las condiciones de acceso y salida del Fondo de Liquidez Autonómica y ser dependiente del cumplimiento de reformas para asegurar la sostenibilidad de la deuda autonómica.