SEVILLA, 9 Ene. (EUROPA PRESS) -
La secretaria general de CCOO-A, Nuria López, ha lamentado este miércoles que las negociaciones para la formación de gobierno en Andalucía se estén llevando a cabo "en Madrid" por dirigentes políticos que "no han sido votados por los andaluces". "Es triste que el futuro de Andalucía se negocie fuera de esta tierra", ha advertido.
Así lo ha señalado en una entrevista en Canal Sur Televisión, recogida por Europa Press, donde ha añadido que "los dirigentes políticos de Andalucía parecen los porteros de los dirigentes de Madrid cuando vienen al Parlamento, solo abren y cierran la puerta".
"Las candidaturas para el 2 de diciembre eran Juanma Moreno (PP), Juan Marín (Cs), Susana Díaz (PSOE) y Teresa Rodríguez (Adelante Andalucía). Estos son los políticos que han votado los andaluces", ha reprochado López, toda vez que ha advertido sobre qué pasará cuando "vengan problemas en Andalucía". "No sabemos si el gobierno de turno le va a exigir entonces a Madrid", ha apuntado.
De igual manera, ha llamado la atención sobre los "dos acuerdos en paralelo" que "despistan" entre PP y Cs y PP y Vox. Respecto al primero, ha mostrado su rechazo porque, aunque "algunas medidas pueden sonar bien", hay elementos "sustanciales y nucleares" que no aborda, como el paro o la siniestralidad.
Respecto a los cambios en la Ley de Violencia de Género, asunto que ha incorporado al debate Vox, la secretaria general de CCOO-A ha recordado que se trata de "un mandato estatutario" en Andalucía. "Cuando los andaluces han pedido cambio es para avanzar y para construir, no para destruir lo que llevamos andando", ha afirmado.
De esta manera, ha calificado de "barbaridad y aberración" querer "acabar con medidas y normativa que han posibilitado que muchas mujeres puedan acceder a educación y a recursos para mejorar su vida". En este sentido, ha señalado que se trata de proteger a las víctimas y de colocar "escalones" para que las mujeres puedan acceder a ser libres.
Por último, ha pedido al nuevo gobierno que se forme en Andalucía que sitúe en "el centro de todas las políticas" los problemas de los andaluces y que no sea "un quítate tú para ponerme yo".
