GRANADA, 18 Jun. (EUROPA PRESS) -
La Guardia Civil ha puesto a disposición judicial en calidad de investigados a dos individuos de 23 y 30 años, vecinos de Atarfe (Granada), como presuntos autores de un delito de receptación por comprar un teléfono móvil de alta gama procedente de un robo con violencia perpetrado por cuatro personas encapuchadas.
Según ha informado la Guardia Civil en una nota de prensa, el primer investigado compró el teléfono por 120 euros, cuando su valor real superaba los 700, y luego se lo vendió al segundo investigado por 150 euros, en cuyo poder lo han recuperado los agentes del equipo territorial de Policía Judicial de Maracena.
Este equipo está investigando un robo con violencia ocurrido el pasado mes de abril en Fuente Vaqueros, también en el área metropolitana de Granada. Un vecino se dirigía supuestamente "a coger su furgoneta para dirigirse a comprar al Mercagranada cuando fue asaltado por cuatro individuos encapuchados y armados con una pistola que le sustrajeron mil euros y el teléfono móvil ahora recuperado".
Las pesquisas que están realizando los agentes del equipo de Policía Judicial de Maracena para identificar a los atracadores han servido, de momento, para averiguar que el teléfono robado "había tenido ya dos propietarios diferentes y que ambos eran conscientes" de que dicho móvil procedía de un robo, por lo que fueron investigados por receptación.
TELÉFONOS RECUPERADOS
Por otra parte, la Guardia Civil ha investigado a un vecino de Iznalloz, un joven de 25 años sin antecedentes policiales, como presunto autor de un delito de apropiación indebida de un teléfono móvil de alta gama valorado en 900 euros.
El investigado ha manifestado que se encontró el teléfono en la calle. No obstante, los agentes del Área de Investigación de los Montes Orientales continúan investigando para averiguar quién sustrajo el teléfono móvil.
La propietaria denunció que había enviado a reparar su teléfono y, cuando el servicio técnico la llamó para preguntarle por la satisfacción del servicio recibido, una vez reparado el móvil, "se enteró de que se lo habían enviado y alguien lo había sustraído, porque ella nunca llegó a recibirlo".
El Instituto Armado también ha investigado a un joven de Pulianas, de 18 años, por el presunto hurto de un teléfono móvil. Este joven había quedado con un amigo en Guadix al que sólo conocía por las redes sociales, pernoctaron juntos y, a la mañana siguiente, "huyó de la vivienda llevándose el teléfono móvil del joven con el que se había citado el día anterior".
Son parte de los 51 recuperados por la Guardia Civil en la provincia de Granada en 2018. A consecuencia de ello, 59 personas han sido puestas a disposición judicial ya sea por robo, hurto, receptación o apropiación indebida de estos teléfonos.
