JAÉN, 11 Ene. (EUROPA PRESS) -
El consejero de la Presidencia de la Junta de Andalucía, Gaspar Zarrías, defendió hoy que el decreto de los campos de golf, que el próximo lunes será analizado por los miembros de la Mesa de Turismo, compatibiliza la constitución de unas instalaciones "de excelencia con una clara vertiente ambiental".
En declaraciones a los periodistas en Jaén, Zarrías explicó que el decreto, que también contempla que estos campos nunca deben ser regados con agua potable, atiende igualmente a que estos recintos tengan un atractivo turístico así como que desde el punto de vista urbanístico sean "intachables".
"Queremos que el golf no sea solo un deporte, sino también un elemento de dinamización económica significativo, de ahí que hayamos trabajado en buscar la confluencia entre lo que tiene que ser un deporte y la actividad económica", manifestó el consejero de la Presidencia, quien insistió en que han conjugado posiciones desde las perspectivas urbanística, deportiva, turística y ambiental.
Además, apuntó que en Andalucía se da la circunstancia de que este deporte se puede ejercitar durante once meses al año, mientras que en Europa durante seis meses no se puede practicar debido a las condiciones meteorológicas.
El borrador de decreto regulador sobre los campos de golf establece un plazo de dos años como período para el que se puedan adaptar las actuales instalaciones a los requerimientos de la nueva normativa, según indicaron a Europa Press fuentes participantes de la negociación de dicha norma, que precisaron que en este documento se contempla la creación de la nueva figura de campos de interés turístico y de una comisión técnica encargada de evaluar la obtención de esa certificación de campo de interés turístico, así como de determinar, en casos excepcionales, si habrá viviendas residenciales o no en dichas instalaciones.
Estos campos de golf de interés turístico tendrán unas condiciones y características especiales en materia de calidad ambiental, siendo "especialmente respetuosos" con el uso de los recursos hídricos, las condiciones del entorno y con la recuperación de las especies autóctonas, de forma que serán "campos de especial excelencia".
Agregaron que esta nueva modalidad tendrá como requisito que contenga un campo de golf de más de 18 hoyos, con unas dimensiones de más de 70 hectáreas "y con 30 hectáreas más por cada nueve hoyos más". Al margen de los campos de golf de interés turístico, para el resto de campos se fija una superficie mínima de 20 hectáreas para nueve hoyos y 20 hectáreas más para cada nueve hoyos adicionales más.
