ALMERÍA, 27 Sep. (EUROPA PRESS) -
La Diputación de Almería, a través del área de Asistencia a Municipios, colabora con Alcudia de Monteagud en la conservación de la Torre de la Antigua Alquería del Despoblado de Alhabia mediante la redacción de un proyecto de mantenimiento. El material arqueológico sitúa cronológicamente este elemento entre los siglos XIII y XVI.
En un comunicado, la Diputación ha explicado que la Torre del Despoblado de Alhabia se considera como último vestigio de este asentamiento, que desapareció tras la rebelión que protagonizaron los habitantes del Reino de Granada en 1571, y su posterior expulsión por el rey Felipe III.
Esta actuación se suma a la apuesta que ha realizado la Diputación Provincial por recuperar el patrimonio histórico y cultural de la provincia y que se ha traducido en un impulso al turismo patrimonial en las zonas del interior.
La torre se encuentra a un kilómetro y medio del casco urbano de Alcudia de Monteagud y tiene unas dimensiones de siete metros y medio de lado y una planta cuadrada. Al tratarse de un elemento defensivo, cuenta con unos gruesos muros de mampostería que, en su base, llegan a alcanzar casi el metro y medio de espesor, reduciendo su grosor conforme cobra altura. Esta elemento está declarada Bien de Interés Cultural (BIC) desde 1985.
La intervención propuesta para la conservación de la Torre del Despoblado de Alhabia pretende lograr su consolidación estructural para evitar el progresivo deterioro y la pérdida de estabilidad de los muros, tomando como criterios de actuación la "mínima intervención" y el máximo respeto del estado actual de la edificación. Por esa razón, se respetarán las aportaciones de épocas anteriores, sus materiales y su morfología.
Los materiales empleados en el proyecto de conservación serán compatibles con los existentes, utilizando la mampostería y la piedra de la zona o morteros de cal, y se considerarán criterios de reversibilidad y de comportamiento estable. Los métodos constructivos serán compatibles con la tradición de la torre y las restituciones que se practiquen se realizarán con materiales propios del espacio.
LA TORRE DEL DESPOBLADO DE ALHABIA
En su origen, La Torre alcanzaba los diez metros de altura, estando dividida por dentro en cinco plantas en altura. En el piso bajo, se encontraba la puerta de acceso; el primero estaba completamente cerrado; el segundo contaba solamente con una ventana en forma de saetera; el tercero poseía cuatro ventanas; el cuarto tres; y, en el último, había dos, a ras de suelo.
La comunicación a través de los distintos niveles debía hacerse a través de trampillas, ya que no quedan restos de escaleras.
A pesar de la importancia histórica de esta edificación, en la actualidad presenta un mal estado de conservación. En general, mantiene sus alzados originales aunque tiene dos grandes aberturas debidas al derrumbe de sus materiales de construcción: una en la esquina oeste y otra en la cara sureste, que están acelerando su deterioro y poniendo en peligro la estabilidad del conjunto.
El estado de abandono de la torre se ha visto agravado por el crecimiento espontáneo de vegetación en su interior, cuyas raíces afectan a los cimientos de la misma.
CONVENIO CON EL OBISPADO
La recuperación del patrimonio cultural supone la puesta en marcha de un nuevo atractivo turístico. En este sentido, la Diputación de Almería impulsó un convenio con el Obispado que ha permitido ejecutar más de 74 obras de mejoras en templos y edificios singulares con una inversión de más de un millón de euros.
Fruto de este acuerdo, son las obras ejecutadas en el Santuario de 'El Saliente', en la parroquia de Antas o en muchas iglesias de la provincia construidas en los siglos XVIII y XIX.
Entre las intervenciones más importantes que ha realizado en los últimos años la Diputación de Almería para restaurar el patrimonio en la provincia, se incluyen varios edificios catalogados como BIC. Es el caso del Castillo de Velefique, la Iglesia de Gérgal o el Palacio del Rey Chico de Fuente Victoria.
Además, se ha actuado en lugares emblemáticos como la Ermita de San Antonio, o las iglesias de Polopos, Lucainena y Albanchez. También está prevista la recuperación de dos edificios emblemáticos de Laujar de Andarax, como un palacio del siglo XVIII y su plaza de toros.