SEVILLA, 17 May. (EUROPA PRESS) -
El diputado del grupo parlamentario popular Jorge Ramos Aznar instó hoy a la Junta de Andalucía a que se "replantee" en Plan de Calidad Medioambiental puesto en marcha en 2005, ya que, según argumentó, "en los últimos dos años la refinería de San Roque ha tenido hasta 11 escapes de dióxido de azufre".
Durante su intervención en la Comisión de Salud del Parlamento andaluz, Ramos Aznar declaró que este número de episodios contaminantes "no se puede consentir", al tiempo que consideró que los mismos "demuestran que el Plan de Calidad no está funcionando, ya que, de lo contrario, no cabría hablar de 11 vertidos de la misma refinería".
"Por consiguiente no se está cumpliendo el plan o, al menos, se está siendo excesivamente permisivo", recalcó el diputado popular, quien además vinculó los escapes contaminantes de la industria campogibraltareña con las "altas tasas de enfermedad y mortalidad" de la zona.
Al hilo de ello, ironizó que los vecinos de las zonas adyacentes a la refinería "confían más en la orientación de los vientos, que en los propios medio de seguridad que puede ofrecer los dispositivos de salud cuando se produce un escape". Según dijo, este hecho responde a que los ciudadanos "no se sienten debidamente informados con estas cuestiones".
Con todo, puntualizó que la actividad industrial "puede ser compatible con el medio ambiente y la salud", si bien enfatizó que "la sensación de los ciudadanos es que hay una vinculación de las tasas de enfermedad y mortalidad registradas en la zona relacionadas con esa actividad", por lo que incidió en la necesidad de que la Administración aporte "más información".
"Los ciudadanos quieren conocer de una vez por todas la vinculación que tiene la actividad industrial con su salud, además de conocer los dispositivos de salud que existen, si hay un plan de inspecciones sanitarias referido a esta actividad industrial", abundó el diputado popular.
ACTIVIDAD INDUSTRIAL Y SALUD
En cuanto a la "vinculación" de determinadas enfermedades cancerígenas con la actividad industrial de la zona, Ramos Aznar se refirió igualmente a "determinados estudios" que vinculan la aparición de estas patologías con este sector "como los elaborados por la Universidad Pompeu Fabra".
"La Junta siempre ha negado la información e intentado tapar las consecuencias negativas que ha tenido la emisión de estos vertidos para la salid, lo que ha provocado que los ciudadanos sigan instalados en la preocupación", continuó el diputado del PP, quien recalcó que "todos los grupos parlamentario, a excepción del PSOE, han exigido la elaboración de un plan epidemiológico que diese respuesta a esta incógnita".
Por su parte, la consejera de Salud, María Jesús Montero, reconoció que el escape de dióxido de azufre del pasado 14 de abril provocó una nube tóxica, si bien puntualizó que los valores máximos contaminantes de la misma "no superaron los 350 microgramos por metro cúbico, tal y como marca la legislación vigente".
"TOLERANCIA CERO" Y EXPEDIENTE SANCIONADOR
Así, detalló que la empresa sólo alcanzó un pico "de 258 microgramos por metro cúbico de media durante una hora, procediendo la propia empresa a parar la planta". En cualquier caso, quiso dejar claro el "profundo rechazo" a este escape y la "tolerancia cero" con este tipo de empresas, motivo que derivó a que la Junta "procediese a la apertura de un expediente sancionador y que la empresa tenga que someterse a una auditoria externa, que además tendrá que pagar la propia empresa", recordó.
Además, sostuvo que la empresa tendrá que rebajar la cota máxima de emisión 245 a 225 microgramos por metro cúbico de aire, mejorar su protocolo de información a los vecinos de la zona e instalar "en el plazo de tres meses" una estación para el control del aire en la barriada. Respecto al Plan de Calidad Medioambiental, la consejera de Salud señaló que el mismo "puede ejecutar medidas adicionales como la reducción de la producción de la empresa".
DISPOSITIVOS SANITARIOS Y RELACIÓN MORTALIDAD
Añadió que cuando su departamento tuvo conocimiento de la emisión tóxica "se solicitó de forma inmediata información a los centros de salud, los servicios de urgencias de los hospitales de La Línea y del Punta de Europa, así como a las unidades móviles".
Como consecuencia de ello, destacó "se atendieron a ocho personas con vómitos, cefaleas y dolores abdominales, síntomas que podían estar relacionados por estas causas, aunque los propios pacientes señalaron que no habían estado en contacto con la emisión".
En cuanto a las posibles relaciones entre la actividad industrial y la salud de la población, Montero replicó que en el atlas de mortalidad "es verdad que existía más mortalidad en Sevilla, Cádiz y Huelva", si bien puntualizó que dicha mortandad "tiene múltiples factores como la pobreza y los malos hábitos de vida, que están íntimamente relacionados con los niveles de mortalidad".
"Hay factores socioeconómicos que condicionan los factores de salud", declaró Montero, quien quiso dejar claro que la mortalidad actual "responde a factores socioeconómicos de los años 60 y 70 --del siglo pasado-- donde existían peores condiciones de vida". "Esto hay que destacarlo y esa situación no se expresa de inmediato, sino que se expresa en los años posteriores", valoró.
"Dicho esto, que está perfectamente descritos en la literatura científica, en el Campo de Gibraltar existía hace 20 años unos niveles de consumo de tabaco por encima del 80 por ciento de la población, lo que motiva una mayor mortalidad de cáncer de pulmón", prosiguió a modo de ejemplo Montero, quien dijo que ello "no significa que la culpa la tengan los ciudadanos, sino que dependen de otros factores".
Al hilo de ello, dijo que "si nos fijamos ahora en las poblaciones más jóvenes de estas provincias, la mortalidad es inferior a la media nacional e, inclusive, a otras provincias de la comunidad", destacó.
Por todo ello, valoró que "no hay factores que indiquen que haya un déficit del sistema inmunitario provocado por la exposición a agentes contaminantes en el Campo de Gibraltar".