Experto vaticina que la primavera será "intensísima" en cuanto a las concentraciones de polen en la comunidad

Actualizado: domingo, 25 marzo 2007 14:00

Unos dos millones de andaluces son alérgicos al polen, principalmente del olivo, la gramínea, el plátano de sombra y las cupresáceas

SEVILLA, 25 Mar. (EUROPA PRESS) -

El especialista y miembro de la Sociedad Española de Alergología (SEA) Antonio Chaparro advirtió de que esta primavera se prevé que sea "intensísima" en lo que a "las altas concentraciones de pólenes se refiere", unas polinizaciones, precisó, "responsables de que el 25 por ciento de los andaluces sean alérgicos a los pólenes, fundamentalmente del olivo, las gramíneas, el plátano de sombra y las cupresáceas".

Chaparro explicó, en declaraciones a Europa Press, que la abundancia de lluvias caída a lo largo del pasado otoño, unido a las altas temperaturas que se han venido registrando durante el mes de febrero y lo que va de marzo "hacen prever que esta primavera sea intensa para los alérgicos a esta plantas, ya que se sobrepasarán sus índices reactivos", --número de granos por metro cúbico de aire a partir del cual el alérgico a un tipo de polen comienza a sufrir los efectos de la polinización--.

Así, detalló que las estaciones de Sevilla, Málaga y Jaén están detectando cifras de concentración de granos de polen de cupresácea --como el árbol del ciprés-- por metro cúbico de aire "similares a las registradas la pasada campaña, cuando se llegó a alcanzar los 1.900 granos por metro cúbico, lo que supuso un hito". Según estimó, de volverse a alcanzar cifran similares a la de 2006 "prácticamente la totalidad de los alérgicos a este tipo de polen sufrirán sus efectos, ya que su índice reactivo se sitúa entre 100 y 150 granos por metro cúbico".

De igual forma, vaticinó una primavera de "especial incidencia" para los alérgicos al plátano de sombra, un tipo de árbol "que prolifera abundantemente en Sevilla capital" y cuya concentración se sitúa ya "entre los 300 y 400 granos por metro cúbico", situándose su índice reactivo "que no está muy bien establecido" en unos 200 granos, detalló.

Respecto a las gramíneas, señaló que las previsiones apuntan a que esta primavera se registrarán de media diaria unos 3.000 granos por metro cúbico de aire, situándose su índice reactivo a partir de los 50 granos por metro cúbico. Según dijo, este tipo de planta "es la principal responsable de las alergias debido a su gran poder alergénico".

En cuanto a las previsiones de futuras alergias al polen del olivo, aclaró que "aún no tenemos polen del olivo", si bien advirtió de que las previsiones "apuntan a que su polinización, que suele comenzar a mediados de abril, se adelante".

RINITIS Y GASTO FARMACÉUTICO EN 2006

Chaparro explicó que más del 25 por ciento de la población andaluza es alérgica al polen --en cualesquiera de sus formas--, siendo la rinitis la principal molestia que sufren estos alérgicos. Así, indicó que su cuadro clínico "se suele corresponder con picores de nariz y ojos, moqueo y obstrucción nasal", toda vez que precisó que el perfil tipo del paciente alérgico se corresponde con un joven adulto, "aunque ahora empezamos también a ver casos de adultos por encima de los 35 años y niños de 5 a 8 años en las que estas alergias comienzan a debutar".

En cuanto al gasto farmacéutico relacionado con los fármacos más consumidos por estas alergias, fuentes del Servicio Andaluz de Salud (SAS) consultadas por Europa Press detallaron que el pasado año dicho montante ascendió en Andalucía a los 34,2 millones de euros, "correspondientes a 84 millones de dosis de antihistamínicos, descongestionantes nasales y preparados oftalmológicos". Además, concretaron que "más de la mitad" de ese gasto se concentró en los meses de marzo a junio.

ZONAS URBANAS FRENTE A ZONAS RURALES

Este experto, quien también ha sido jefe de Sección del Servicio de Inmunología y Alergia del Hospital Virgen Macarena de Sevilla, señaló, por otra parte, que, "a diferencia de lo que comúnmente se pueda pensar, el polen de las ciudades es más agresivo que el de las zonas urbanas, entre otros aspectos, por la contaminación atmosférica y un sistema inmunológico de la persona menos entrenado".

En cuanto al factor medioambiental, Chaparro sostuvo que "ya desde la II Guerra Mundial se comenzó a observar, primero en Japón y luego en el resto de países industrializados, como la combustión de los motores diesel de los automóviles provoca una agresión en los pólenes, los cuáles reaccionan expresando proteínas de defensa que los hacen más fuertes y resistentes frente al alérgico", concluyó.