CAMAS (SEVILLA), 9 (EUROPA PRESS)
Las familias de los alumnos del colegio de Educación Infantil y Primaria (CEIP) Raimundo Lulio de Camas (Sevilla) han celebrado este martes una concentración ante la Delegación territorial de la Consejería de Educación, actualmente dirigida por Joaquín Pérez Blanes, en demanda de soluciones a la paralización de las obras de la segunda fase del nuevo recinto de este centro, cuando apenas quedaba "un mes" para su finalización tras aproximadamente 15 años en demanda de la renovación completa de las instalaciones.
Recordemos que la construcción de un nuevo recinto para el CEIP Raimundo Lulio constituye una reivindicación histórica en Camas, dada la antigüedad y malas condiciones de conservación del viejo centro. En ese sentido, la Junta de Andalucía construyó y puso en servicio la primera fase del nuevo edificio del centro, si bien las nuevas instalaciones carecen de gimnasio o comedor y sólo pueden acoger a la mitad del alumnado, actualmente dividido entre las instalaciones antiguas y las nuevas.
Fue en 2017 cuando, finalmente y tras no pocas reivindicaciones, la Junta de Andalucía adjudicó a una unión temporal de empresas (UTE) constituida entre el Grupo Constructor Grucal Andalucía y la empresa Juan Bueno y Compañía las obras de la segunda fase del proyecto de sustitución del edificio del colegio, al objeto de completar el nuevo recinto y unificar en el mismo a toda la comunidad educativa del CEIP Raimundo Lulio.
Pero mientras las obras de la segunda fase deberían haber finalizado "en diciembre" de 2018, según la asociación de madres y padres de alumnos (AMPA), a comienzos de febrero de este año, recordémoslo, la Federación Provincial de Industria, Construcción y Agro de UGT-Sevilla alertaba de que la plantilla contratada por Grucal para este proyecto acumulaba entonces el impago de tres nóminas y dos pagas extraordinarias, un impago que persiste a día de hoy, según manifestaba a Europa Press María Ángeles Gómez, concejal de Educación del Ayuntamiento de Camas.
OBRAS PARALIZADAS
Según la concejal de Educación, como consecuencia de estos prolongados impagos a la plantilla, las obras de construcción de la segunda fase del nuevo recinto del colegio Raimundo Lulio quedaron paralizadas, cuando apenas quedaba "un mes y medio" para acabar los trabajos y que el citado centro educativo contase al fin con todo un nuevo recinto completo.
Dado el caso, la comunidad educativa del CEIP Raimundo Lulio ha celebrado varias concentraciones de protesta a las puertas del nuevo edificio del colegio, confirmando a Europa Press Joanna Abellán, presidenta de la AMPA, que como consecuencia de los impagos de nóminas que padecen los trabajadores contratados por Grucal para estas obras, las mismas están paralizadas cuando apenas restaba "un mes" para su conclusión.
Al respecto, y después de varias concentraciones en Camas, las familias han celebrado este martes por la mañana una concentración a las puertas de la sede de la Delegación territorial de la Consejería de Educación, dirigida por Joaquín Pérez Blanes, en demanda de soluciones.
Según Joanna Abellán, en el contexto de esta protesta, las madres y padres de alumnos han podido entrevistarse con un responsable de dicho departamento, deduciendo que la Consejería de Educación sopesaría "rescindir" el contrato adjudicado a la UTE constituida entre el Grupo Constructor Grucal Andalucía y la empresa Juan Bueno y Compañía para estas obras de la segunda fase del colegio Raimundo Lulio.
Y aunque los responsables de la Delegación de Educación alegarían que dicha medida sólo supondría "unos meses" de retraso en los trabajos, Abellán ha manifestado el temor de las familias ante la posibilidad de que el fin de los trabajos se prolongue "más de un año". "Vamos a seguir con las reivindicaciones y concentraciones hasta tener algo definitivo", ha aseverado.