SEVILLA, 13 Sep. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, ha anunciado este jueves en el Parlamento que acudirá el próximo 2 de octubre a la Conferencia de Presidentes con el ánimo de defender una nueva "fase de cooperación" entre las autonomías que evite cualquier tipo de "desigualdad o asimetría" entre todas y cada una de las partes del Estado porque ello "rompería", según ha argumentado, "el motor fundamental del desarrollo autonómico".
En respuesta a una pregunta formulada por el diputado socialista Francisco Álvarez de la Chica a propósito de este encuentro con el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y con el resto de presidentes autonómicos, Griñán ha informado de que propondrá un decálogo de "ejes básicos" a seguir para que "todos ganemos con ellos" y para que "la crisis no pueda poner en peligro los consensos básicos constitucionales" que se establecieron en 1978: el modelo social y el modelo de Estado.
"Es tiempo de diálogo y de entendimiento, de fortalecer el mandato representativo y de reforzar los consensos constitucionales", ha advertido tras referirse a la manifestación independentista que se celebró el martes en Barcelona. Un hecho, según ha dicho, "que adquiere relevancia en vísperas" precisamente de este encuentro de presidentes.
"No podemos desentendernos de esta realidad como tampoco podemos hacerlo de la Constitución Española y del marco de convivencia que tanta estabilidad y prosperidad nos ha dado a todos, a España y al conjunto de sus comunidades, al norte y al sur, que conviven en un proyecto común y mutuamente enriquecedor en el que no caben egoísmos, desprecios o medias verdades", ha añadido.
Es por ello por lo que el jefe del Ejecutivo andaluz ha insistido en que "la respuesta política" a estas manifestaciones "está en la Constitución y solo en la Constitución" y que en este encuentro de presidentes se deben "reforzar los consensos constitucionales". Sobre todo, según ha explicado, porque la crisis puede ponerlos en "peligro". "Tantas voces dicen tantas veces en tantos sitios que el Estado del Bienestar y de las Autonomías son infinanciables sin serlo que, cuando se dice esto, nos lleva a una situación de vacío y de alto riesgo", ha advertido.
Frente a ello, Griñán propondrá a Rajoy y a sus homólogos "pasar de la fase de construcción de la autonomías a un fase de cooperación activa" para "poner en marcha la reactivación económica, tratar de crear empleo entre todos e impedir que un estado de excepción económica como el actual se convierta en un estado de excepción política". Así, Andalucía defenderá "todo lo que sirva para volver a crear empleo" pero siempre y cuando las medidas a tomar sean fruto de un "diálogo profundo entre todos".
CONVOCATORIA POR CARTA
Griñán ha explicado este jueves que la convocatoria oficial para esta Conferencia de Presidentes le llegó el pasado martes 11 de septiembre --coincidiendo con la Diada--, si bien con anterioridad la vicepresidenta Soraya Sáez de Santamaría se había puesto en contacto con él por vía telefónica para "ver cómo podíamos abordar" esta reunión.
En la misiva, Rajoy le informa de que el objetivo fundamental del encuentro será el de "recuperar el crecimiento económico y la creación de empleo" y el de "fortalecer la imagen de España en el exterior", por lo que le propone, tal y como abordó con el presidente andaluz en su encuentro en la Moncloa de este verano, "centrar el debate de la Conferencia en nuestros grandes retos compartidos: la situación económica y el futuro de la Unión Europea", ha especificado Griñán.
EL DECÁLOGO
Teniendo presentes estos objetivos prioritarios, el presidente del Gobierno andaluz ha elaborado un decálogo de "principios" con los que se ha mostrado "convencido" de que se pueden llegar a "puntos de encuentro" con el resto de autonomías porque, tal y como ha recalcado, él busca "que todos ganemos porque lo mejor para España siempre será bueno para Andalucía".
Estos diez "ejes básicos" son: entender que las comunidades autónomas "no son el problema sino parte de la solución porque nunca en estos años había crecido el conjunto del Estado y cada una de las partes de forma tan equilibrada como lo ha hecho desde los años 80"; iniciar una nueva "fase de cooperación en el entendimiento de que la desigualdad o la asimetría entre las partes del Estado de las autonomías rompería el motor fundamental del desarrollo autonómico"; utilizar como "objetivo compartido" el empleo; insertar "de forma explícita y permanente" el empleo en la agenda política; iniciar una "reforma fiscal que reparta más equitativamente la carga tributaria, "que hoy está volcada casi exclusivamente en la renta y consumo de las clases trabajadoras"; decidir "gastos prioritarios para la determinación y reparto de los objetivos de déficit"; "reformular la financiación autonómica con una aplicación más objetiva del modelo que garantice la liberación de los servicios públicos fundamentales; luchar contra el fraude fiscal y social; buscar un "consenso para que la Unión Europea se implique más activamente en la salida de la crisis", y, en décimo lugar, aunque Griñán ha dicho que "es el primero", que la educación, el conocimiento, la investigación y la innovación e igualdad de oportunidades sea "la mejor estrategia para superar la crisis".
