HUELVA, 14 Feb. (EUROPA PRESS) -
El subdelegado del Gobierno en Huelva, Manuel Bago, se comprometió hoy con el sector pesquero --especialmente con los profesionales del cerco-- a solicitar al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación que eleve al seno de la Unión Europea (UE) la posibilidad de realizar un nuevo estudio científico del caladero del Golfo de Cádiz.
En un comunicado remitido a Europa Press, la Subdelegación explicó que el objetivo de este estudio es "ver si las circunstancias de vida han cambiado y se puedan extraer conclusiones que conduzcan a exigir para el boquerón y la pijota idénticas tallas de las que la UE exige en aguas del Mediterráneo, donde se permite la captura de menor tamaño de estas especies".
Según recordó, la limitación de las tallas del pescado "vienen determinadas por estudios científicos biológicos sobre las especies en los lugares en los que habitan, de manera que no es una decisión política la que cabe adoptar en este caso, sino que la imposición de la UE está avalada en estudios científicos realizados por expertos".
Este compromiso surgió de la reunión que mantuvo hoy el subdelegado del Gobierno con el sector, reunión en la que también ha participado el delegado de Agricultura y Pesca de la Junta de Andalucía en Huelva, Juan Manuel López.
En este encuentro, se ha debatido también sobre la posibilidad de que el paro biológico remunerado se pueda ampliar de 45 días --que dura en la actualidad-- hasta tres meses, como pide el sector, un extremo que en su aspecto económico también es competencia del Parlamento Europeo, por lo que la solicitud se elevará igualmente al Ministerio.
Ambos mandatarios emplazaron al sector a "esperar el resultado de una reunión que tendrá lugar el próximo día 22 en Sevilla en la que los máximos responsables de Pesca tanto del Gobierno central como de la Junta de Andalucía van a analizar con detenimiento estas peticiones".
De igual modo, las dos administraciones han programado unas jornadas sobre pesca que se celebrarán en Huelva los días 1,2 y 3 de marzo y que servirán para organizar diferentes mesas de trabajo que persiguen "estudiar los problemas concretos del sector para atajarlos por separado y encontrar más fácil solución".
El subdelegado consideró que, "si el problema se aborda en su generalidad, se puede perder el sentido de cada reivindicación y la posibilidad de priorizar en función de lo que el propio sector considere más urgente".
