SEVILLA 13 May. (EUROPA PRESS) -
La Junta de Andalucía ha recordado la influencia de los precios energéticos en el Indice de Precios al Consumo (IPC), donde destaca el incremento de los precios en el área de vestido y calzado, debido a la nueva temporada de primavera-verano.
En una nota, la Consejería y Conocimiento ha indicado que la subida en Andalucía de un 0,8 por ciento en abril con respecto al mes anterior supone una décima más que en el conjunto de España (0,7 por ciento), de forma que con este dato, la tasa de inflación de la comunidad se sitúa en el -1 por ciento, una décima más que la media nacional (-1,1 por ciento) y dos décimas inferior a la del mes anterior (-0,8 por ciento).
En la evolución mensual del IPC en Andalucía destacan los aumentos en vestido y calzado, debido a la nueva temporada de primavera-verano; transporte, consecuencia de la subida de carburantes y combustibles; y comunicaciones, por el aumento de los precios de los servicios telefónicos. El coste de la vida desciende, por el contrario, en ocio y cultura, principalmente por la bajada en viaje organizado tras la Semana Santa; y vivienda, por la reducción de precios de la electricidad, el gas y otros combustibles.
En términos interanuales, tres de los doce grupos de bienes y servicios que componen el IPC presentan tasas negativas, esto es, vivienda, por la bajada del precio de la electricidad, el gas y otros combustibles; transporte, debido a la caída en carburantes y combustibles; y ocio y cultura, principalmente por el viaje organizado.
En el resto de grupos, los mayores incrementos de precios en la comunidad andaluza se producen en los apartados de comunicaciones, a causa de la subida de los precios de los servicios telefónicos; y alimentos y bebidas no alcohólicas, especialmente por los aceites y grasas, las frutas frescas, y las patatas y sus preparados.
La Consejería de Economía y Conocimiento considera que la tasa de inflación de Andalucía en el mes de abril (-1 por ciento), dos décimas más negativa que en el mes anterior, viene determinada como en meses anteriores por el comportamiento de los precios energéticos.
Así, recuerda que, por un lado, el precio del petróleo, cuya cotización media del barril de Brent de 41,1 dólares, un 30,4 por ciento inferior a la registrada en el mismo mes de 2015, se traslada al precio de carburantes y combustibles (-14,4 por ciento); y de otro, la bajada del precio de la electricidad, el gas y otros combustibles (-17,9 por ciento). Esto ha determinado un descenso de precio de los productos energéticos del 15,3 por ciento interanual en abril, el más elevado desde mediados de 2009.
Asimismo, ha precisado que en abril se registra un menor crecimiento de los precios del componente más estructural, la inflación subyacente (IPC sin alimentos no elaborados ni productos energéticos), que se sitúa en el 0,8 por ciento en Andalucía, dos décimas por debajo de la de marzo (1 por ciento). Esto se debe al descenso de precios de los servicios relacionados con el turismo, tras la Semana Santa, que este año ha caído en marzo, mientras que en 2015 se celebró en abril.