La Junta arremete contra Fernández Díaz por las devoluciones en caliente

SEVILLA 12 Dic. (EUROPA PRESS) -

El consejero de Justicia e Interior de la Junta de Andalucía, Emilio de Llera, ha considerado este jueves que las declaraciones realizadas ayer por el ministro de Interior, Jorge Fernández Díaz, sobre las devoluciones en caliente son "otra regresión y otra salvajada" del Gobierno de la Nación.

Así ha contestado a los medios de comunicación que le han pedido una valoración de las palabras con las que el ministro respondió ayer a las críticas vertidas por distintas instituciones nacionales y europeas, la Iglesia y más de un centenar de ONG sobre la ilegalidad de las devoluciones en caliente: "Si me dan la dirección donde a esa pobre gente los podemos trasladar y garantizan su manutención y que les dan trabajo le aseguro que les enviamos. Pero hay mucha hipocresía", dijo.

Para el consejero andaluz, esto es "otra regresión y otra salvajada porque, muchas veces, hay personas que tienen derecho de asilo, simplemente. Y si las devolvemos sin identificar y sin saber si tiene algún derecho de este tipo o no, a lo mejor las estamos devolviendo a la guerra, a la enfermedad... no lo sabemos, no sabemos qué estamos haciendo con ellos".

En esta línea, De Llera ha advertido de que "una cosa es el rechazo en la frontera previa identificación de una persona que puede tener perfectamente prohibida la entrada en territorio Schengen y otra expulsarlos sin saber siquiera quién es".

Cuestionado sobre si cree que la Unión Europea debería tomar cartas en el asunto, el consejero de Justicia ha dicho que, "evidentemente el problema de las migraciones es de toda Europa", pero que "lo que ocurre es que Andalucía especialmente es la puerta de entrada desde África hacia la Unión Europea".

"Pero insisto una vez más en una cosa que creo que hay que tener muy clara: que la política migratoria no se puede centrar exclusivamente en un tema de control fronteras. Hay que gestionar a la gente que viene legítimamente a la Unión Europea, hay que asentarla y respetar sus derechos fundamentales, entre ellos, el acceso a los servicios públicos esenciales como la sanidad, que debe ser universal y no sólo para los nacionales sino para los inmigrantes sin duda alguna", ha concluido.