SEVILLA, 18 Dic. (EUROPA PRESS) -
La consejera de Hacienda y Administración Pública, María Jesús Montero, ha defendido este jueves la actuación que llevó a cabo la Administración andaluza a la hora de convalidad gastos incluidos en el mecanismo extraordinario de financiación para el pago a proveedores en los que se había omitido la fiscalización previa.
Tras explicar en comisión parlamentaria el mecanismo de pago a proveedores que se adoptó en el Consejo de Política Fiscal y Financiera en marzo de 2012, que establecía como condición que fueran obligaciones pendientes de pago vencidas, liquidas y exigibles, además, de presentadas antes del 1 de enero de 2012, ha señalado que "la Junta actuó conforme a la normativa establecida, cumplió las directrices y dio respuesta a una situación compleja y extraordinaria".
Por su parte, el diputado del PP-A Rafael Carmona ha detallado que hubo un total de 1.750 millones de euros que "la Junta gastó sin autorización, ya que no contaba con crédito presupuestario para esta cantidad".
Así, ha señalado que la Junta elevó el volumen de créditos "sin respaldo presupuestario", lo que conlleva, a su juicio, que "se hayan salido del sistema para gastar 1.750 millones en facturas metidas en los cajones".
Tras señalar que del total, 1.183 correspondía al Servicio Andaluz de Salud (SAS), ha añadio que hay otros 886 millones en el SAS "sin consignación presupuestaria".
Frente a esto la consejera ha reprochado que el intento del PP de "poner en duda y embarrar" la gestión de la Junta y ha explicado que Andalucía no hizo nada diferente al procedimiento que se adoptó en el CPFF.
De igual manera, ha recordado que los créditos del SAS eran créditos "ampliables" sujetos "por la urgencia en la gestión del servicio".
Por último, ha insistido en que la no fiscalización previa no significa que "luego no se comprueben las facturas".
