MORON DE LA FRONTERA (SEVILLA), 25 May. (EUROPA PRESS) -
Los trabajadores de la base aérea de Morón de la Frontera (Sevilla) celebrarán hoy una asamblea para organizar movilizaciones destinadas a reclamar un impulso a la negociación del nuevo convenio colectivo, pues los empleados de esta base cuya soberanía comparten España y Estados Unidos entienden que Arquitectos e Ingenieros del Pacíficos (PAE), la empresa que gestiona las instalaciones, ha "paralizado" las conversaciones.
El presidente del comité de empresa de la base, Francisco García (UGT), informó a Europa Press de que la asamblea ha sido fijada para las 12.30 horas de hoy en las propias instalaciones de la base, con lo que señaló que en dicha asamblea se debatirán las medidas de protesta necesarias para "obligar a la empresa a negociar" la elaboración del nuevo convenio colectivo, dado que la vigencia del anterior concluyó a finales de 2005. "Algo tenemos que hacer", dijo al respecto.
El portavoz sindical dijo que los trabajadores reclaman una nueva convocatoria de la mesa negociadora del convenio, y señaló que para ello recurrirán a las "movilizaciones" a tenor de que en los últimos contactos "no se ha movido nada".
A finales del año 2005, al concluir la vigencia del anterior convenio, los trabajadores entregaron a PAE un anteproyecto para el nuevo convenio, un documento que recogía una subida salarial de dos puntos sobre el incremento del IPC real, la creación de pluses de productividad y la jornada intensiva en los meses de verano.
No obstante, y siempre según el portavoz sindical, desde el mes de enero hasta ahora "nos hemos sentado algunas veces con la empresa" para negociar los términos del convenio, aunque los representantes de PAE "a todo nos dicen que no" bajo la excusa de que las Fuerzas Armadas de Estados Unidos "quieren reducir gastos". De hecho, indicó que la empresa gestora de las instalaciones "ya ha amenazado con recortes de plantilla, como otras veces".
Francisco García consideró que las últimas reuniones celebradas acerca del convenio colectivo han sido "una tomadura de pelo", porque "a todo dicen que no", lo que ha motivado que los trabajadores hayan convocado una asamblea general para el jueves de cara a próximas movilizaciones. "No nos queda otro remedio", dijo el portavoz sindical para advertir de que "estamos ya en mayo" y la base lleva cinco meses sin un nuevo convenio que rija las relaciones entre la empresa y los trabajadores.
Según García, las propuestas de los trabajadores para el nuevo convenio suponen "sólo un poco más" respecto a los términos del anterior convenio, pero insistió en que la situación está bloqueada a consecuencia de la actitud de la empresa.
