SEVILLA, 8 Jul. (EUROPA PRESS) -
Los vecinos de la barriada de El Arenal (Sevilla) llevarán a cabo mañana el primero de los tres cortes de tráfico programados a lo largo del mes de julio en las calles Antonia Díaz y Adriano, en señal de protesta por la obligatoriedad establecida por el Ayuntamiento para que los residentes de este enclave turístico de la ciudad guarden contenedores propios de basura en casa.
El presidente de la comunidad de vecinos del número 3 de la calle Iris y de la asociación de vecinos 'Torre del Oro' de la barriada, Antonio Fernández --único multado por estos hechos con una sanción de 90 euros--, dijo a Europa Press que, si los cortes no sirven para que el Consistorio proponga una alternativa, "como la basura soterrada", llevará esta cuestión a Pleno, con una continuidad de estas actuaciones durante todas las semanas.
"No han multado a nadie más que a mí, cuando los funcionarios municipales incumplen la ley todos los días con los estacionamientos que llevan a cabo", señaló Fernández, que ya ha interpuesto un recurso ante la delegación de Medio Ambiente del Ayuntamiento hispalense por considerar no ajustada a derecho la sanción de 90 euros interpuesta por el Consistorio contra la comunidad, por no retirar de la vía pública un contenedor de basura "de uso exclusivo en el horario establecido".
Los cortes se llevarán a cabo, de 13.00 a 14.00 horas, durante días alternos en la segunda semana de julio, los días 9, 11 y 13, en protesta por la pretensión de imponer la instalación de contenedores domésticos en las casas, medida que consideran "muy antihigiénica e insalubre".
Desde la entidad que dirige Fernández, en este sentido, se remitieron hace meses cuatro escritos dirigidos a Alcaldía, Urbanismo, Lipasam y Casco Antiguo para expresar la "disconformidad" de los residentes del entorno con esta medida. Dada la falta de respuesta por parte del Consistorio, por el momento los vecinos están tirando la basura en los contenedores de la calle, sin que se esté dando uso a los nuevos receptáculos repartidos por la administración local.
Asimismo, los vecinos han comenzado a recoger firmas para, en un escrito dirigido a la Consejería de Salud de la Junta de Andalucía, intentar evitar que el Ayuntamiento consume el reparto de contenedores, "nidos de infección malolientes", lo que consideran un acto "perjudicial y que debe ser frenado de inmediato".
Muchas casas, según se critica, ni siquiera tienen espacio suficiente para albergar el contenedor, lo que plantearía problemas de salubridad e incluso de paso. Asimismo, se aduce que las tiendas del barrio, "muchas de ellas de reducidas dimensiones", no podrían ofrecer a la clientela suficientes garantías de higiene.
