Trabajadores de la cafetería clausurada de UPO recogen firmas e iniciarán protestas para acelerar su licitación

Actualizado: jueves, 16 enero 2014 15:09

SEVILLA, 16 Ene. (EUROPA PRESS) -

Los trabajadores de la cafetería ubicada frente a la biblioteca de la Universidad Pablo de Olavide (UPO) de Sevilla, que fue objeto de cierre patronal por parte de la anterior empresa concesionaria, han iniciado un proceso de recogida de firmas entre la comunidad universitaria, al tiempo que han acordado iniciar un calendario de movilizaciones --aún por definir--, para "agilizar" la salida a concurso del nuevo pliego.

En declaraciones a Europa Press, la delegada sindical de CCOO, Rocío Sierra, ha indicado que, asimismo, ha comenzado el reparto de octavillas informativas entre alumnos y profesores, con el fin de dar a conocer una problemática que, a su juicio, se agrava conforme pasa el tiempo, ya que "para las empresas es cada vez menos atractivo optar a este negocio".

"Estamos dejando la buena fe un poco atrás, porque no queremos perder un año y sí que se acelere ya la salida de los pliegos y que se deje de mirar hacia otro lado", ha añadido Sierra, que recientemente subrayaba que la aspiración, una vez finalizada la redacción de los pliegos, era que la actividad pudiera estar ya vigente en la primavera del presente año 2014.

Los trabajadores que desempeñaban su labor en este establecimiento barajaron alternativas como la creación de una cooperativa entre los propios empleados como modo de reflotar el negocio, si bien "tras hacer números las cuentas no salen", según los mismos, que constataron que esta fórmula no podría prosperar "debido a la gran deuda existente con la Seguridad Social y al hecho de que el anterior empresario se llevó maquinaria que hay que reemplazar".

La UPO, por otra parte, apuntó a su intención de mediar con la empresa que regentaba la cafetería con el fin de tratar de que la situación de los empleados no se vea "lesionada". El rector, Vicente Guzmán, indicó entonces a Europa Press que "vamos a intentar una solución, porque no tenemos responsabilidad real, pero sí moral".

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