EUROPA PRESS/UNIVERSIDAD DE SEVILLA
SEVILLA 12 Ago. (EUROPA PRESS) -
El Grupo de Investigación Biohidrometalurgia de la Facultad de Química de la Universidad de Sevilla (US) ha trabajado en un nuevo proyecto con el objetivo de aprovechar los residuos del reciclado de la chatarra de hierro, por un lado, y las aguas ácidas de mina, por otro, para obtener productos de zinc con la mayor pureza posible y al menor coste.
Según informa la Hispalense en un comunicado, para estas labores los expertos han buscado desarrollar un nuevo proceso de tratamiento que integre los dos componentes con una gestión medioambiental óptima dando a su vez solución a los problemas de contaminación que conllevan los dos residuos.
El catedrático de la US y responsable del estudio, Francisco Carranza Mora, ha explicado que "el proceso consistiría en mezclar el polvo de acería, que es altamente contaminante y contiene un 25 por ciento de concentración de zinc, con las aguas ácidas, que también lo contienen, obteniendo una disolución que es tratada posteriormente con microorganismos extremófilos capaces de oxidar cualquier forma reducida del azufre y que utilizan el CO2 como fuente de carbono, para eliminar el hierro y otros ingredientes contaminantes".
Además, añade que "se pretende conseguir productos como el sulfato de zinc, óxido de zinc, carbonato básico de zinc, y zinc electrolítico en medio alcalino con un precio de venta adecuado en el mercado a un coste razonable, convirtiendo así problemas medioambientales en fuentes de riqueza".
Junto a ello, el grupo trabaja además en otras líneas de investigación como la biolixiviación de sulfuros metálicos, la desulfuración del biogás, la biooxidación de efluentes acuosos, el control del fresado químico del aluminio y tratamiento del efluente, el tratamiento de escorias de fundición de cobre, así como en el tratamiento de cenizas de pirita.
Así, Carranza Mora ha destacado que "desde que se comenzó a investigar en los años 70 sobre biohidrometalurgia siempre ha suscitado interés la idea de desarrollar técnicas nuevas más competitivas y rentables frente a las técnicas convencionales basadas en la aplicación de elevadas temperaturas, además de la preocupación por dar soluciones a los problemas medioambientales que han aparecido a lo largo de estos años".