SEVILLA 31 Mar. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Diputación de Sevilla, Fernando Rodríguez Villalobos, ha salido al paso de la afirmación que, en positivo, ha realizado el ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, acerca del superávit del 0,41 por ciento que registran las entidades locales al cierre presupuestario del año 2013. Más concretamente, Montoro ha manifestado que "las cifras de los ayuntamientos son impresionantes", tras recordar que se han conseguido sin cerrar ayuntamientos y gracias a que España ha actuado como un "país serio" que aplica las normas y que está promoviendo, a través de su administración central, el seguimiento ordenado.
En relación a esto, Villalobos ha recordado, en un comunicado, que "si no se han cerrado ayuntamientos a día de hoy no ha sido precisamente por la ayuda que desde el Ministerio hayamos podido recibir porque, más bien al contrario, el plan de pago a proveedores lo único que ha hecho es aumentar la deuda viva de las administraciones locales".
"Y aún así, las corporaciones locales hemos sido capaces de contener, por segundo año consecutivo, el déficit público y convertirnos en la escala de la administración que más contribuye a ello, con unos 4.000 millones en positivo sobre el objetivo marcado", ha sentenciado Villalobos.
Precisamente por esa cifra positiva, el presidente de la Diputación ha reclamado al ministro que "si le parece impresionante lo que los ayuntamientos han hecho para contener el déficit, lo correcto sería que él nos impresionase ahora a nosotros con una financiación coherente y acorde a nuestras necesidades".
Hay que recordar que, en este sentido, el ministro se comprometió el pasado mes de octubre a abordar la cuestión de la financiación local junto al nuevo sistema de financiación autonómica, que será debatido con las CCAA en el segundo semestre de este año.
En ese contexto, el regidor provincial ha reclamado al gobierno central "que negocie de igual a igual con las entidades locales y les conceda la oportunidad de dejar oír su voz de cara a su futura financiación porque, si se quiere fijar con nitidez y honestidad el reparto de los recursos financieros entre el Estado, las CCAA y las entidades locales, el municipalismo no puede volver a ser tratado como el Convidado de Piedra ni como la Cenicienta de la administración".
"Llegado ese momento, el gobierno tiene la obligación ética e inexcusable de dar cabida a la FEMP y a las federaciones autonómicas de municipios -como la FAMP-, en calidad de interlocutores legítimos y en igualdad de trato con el resto de poderes territoriales", ha concluido el presidente.