TARAZONA (ZARAGOZA), 18 Ago. (EUROPA PRESS) -
Cerca de 300 niños de entre 3 y 12 años han participado en los talleres de Conservación del Patrimonio de la Fundación Tarazona Monumental puestos en marcha cada verano desde 2008 en el Palacio Episcopal de Tarazona (Zaragoza), con la colaboración de la Ludoteca Municipal y del campamento de verano que organiza el Colegio Sagrada Familia.
Según ha señalado el Consistorio turiasonense en una nota de prensa, los niños han aprendido, a través de juegos y actividades plásticas, el valor del patrimonio, la importancia de su conservación y la necesidad de restaurarlo, así como diferentes pautas de comportamiento para que tomen conciencia de que ellos también pueden ayudar a su protección.
"Si desarrollamos este tipo de iniciativas en edades tempranas, tendremos resultados positivos en el futuro, ya que, desde pequeños, aprenderán la importancia de conservar el patrimonio, algo que es fundamental y que cobra aún más importancia en una ciudad con tanto legado", ha afirmado el gerente de la Fundación, Julio Zaldívar.
De esta forma, los participantes han visitado el taller de restauración de la Fundación Tarazona Monumental, donde han podido ver 'in situ' el deterioro que el paso del tiempo, la acción humana y los agentes atmosféricos han causado en una obra de arte. También se han convertido en espectadores del trabajo que plantea el restaurador a la vez que han podido ver, tocar y probar las herramientas y materiales con los que trabaja.
En esta ocasión, han podido observar, asimismo, un lienzo del siglo XVIII propiedad del Ayuntamiento de Tarazona sobre el que han realizado un mapa de daños, en el que han tenido que averiguar los problemas de conservación y decidir cuáles eran las pautas adecuadas para darles solución.
"Han investigado como si fueran auténticos restauradores, han conseguido datar la pieza, determinar la técnica y los materiales con los que está realizada, determinar la temática y la procedencia, y su importancia histórica artística", ha explicado la responsable de los talleres, Lola Zueco.
Por su parte, la restauradora de la Fundación, Nerea Otermin, ha valorado de forma muy positiva el resultado de estas visitas, en las que los pequeños se adentran en un mundo totalmente nuevo y disfrutan mucho de la experiencia.
