El Ayuntamiento de Calamocha y el Centro de Estudios del Jiloca rescatan un libro sobre química del siglo XIX

Actualizado: sábado, 31 octubre 2009 17:02

CALAMOCHA (TERUEL), 31 Oct. (EUROPA PRESS) -

El Ayuntamiento de Calamocha y el Centro de Estudios del Jiloca (CEJ) rescatan un antiguo libro sobre química, del siglo XIX, que será presentado mañana, 1 de noviembre, en Expo Calamocha.

La obra en cuestión lleva por título 'Reflexiones sobre la combinación y el compuesto químico' y está escrita por el humanista y científico calamochino, Marcos Laínez Hernando y editada en 1886. Es una trascripción del discurso leído en la apertura anual de los estudios de la Real y Pontificia Universidad de Santo Tomás de Manila, en Filipinas, donde Laínez fue rector dominico y Catedrático de Química.

El Centro de Estudios del Jiloca abordó la edición de esta obra con la intención de recuperar la memoria de este fraile calamochino y como resultado del interés por distintos estudios de botánicos aragoneses realizados en la Universidad de Manila, investigación en la que trabaja el antiguo presidente del CEJ, José María de Jaime, desde su puesto de profesor de la Universidad San Pablo CEU Cardenal Herrera.

La obra se recuperó de la primera edición realizada en 1886 por la propia Universidad en el Establecimiento Tipográfico del Colegio de Santo Tomás a cargo de don Gervasio Memije. Durante años el Centro de Estudios del Jiloca ha buscado este Discurso en las principales bibliotecas españolas y dominicas, siempre con resultado negativo, hasta localizarlo en la misma Universidad de Manila que finalmente envió una copia.

El libro consta de 78 páginas con varias tablas o cuadros sinópticos y tiene la estructura característica de las conferencias de inauguración de los cursos académicos en las universidades españolas, es decir una lección magistral. El texto se estructura en seis apartados que carecen de título y está plagado de citas científicas así como de notas a pie de página e interesantes referencias bibliográficas.

EL AUTOR

Nacido en abril de 1851 en Calamocha, Marcos Laínez Hernando tomó los hábitos de la orden de Santo Domingo en noviembre de 1866. Estando en la ciudad de Ocaña estudiando Teología fue reclamado desde la Provincia del Santísimo Rosario de Filipinas para acudir a Manila con la misión de difundir la espiritualidad cristiana en las islas.

El 31 de marzo de 1872 salió del convento y en mayo de ese mismo año llegó a la bahía de Manila donde concluyó sus cursos académicos con toda brillantez, y se preparó para recibir las órdenes del sacerdocio.

Después estudió en la universidad madrileña la carrera de Ciencias, y en agosto de 1884 regresó a Manila, siendo asignado a la Universidad de Santo Tomas de Aquino, donde se hizo cargo de la Cátedra de Química de la Facultad de Medicina y de Farmacia.