TERUEL 13 Mar. (EUROPA PRESS) -
La temporada de apertura de los centros de visitantes y yacimientos pertenecientes a la Ruta de los íberos del Bajo Aragón ha dado comienzo este fin de semana. Estos centros permanecerán abiertos en primavera todos los fines de semana y festivos.
Esta Ruta está compuesta por yacimientos arqueológicos íberos de gran importancia como el Cabezo de Alcalá de Azaila, el Palao de Alcañiz y San Pedro de Oliete, entre otros, cuyas cronologías abarcan desde el siglo VII antes de Cristo y hasta el siglo III después de Cristo.
Estos yacimientos, casi una ventena entre poblados y necrópolis, han sido recuperados, señalizados y puestos en valor mediante la instalación de paneles informativos y mesas de interpretación y en algunos casos, como en el de Azaila, se ofrece la posibilidad de realizar la visita acompañado por un guía.
La Ruta cuenta además con diez centros de interpretación, dedicado cada uno de ellos a una temática diferente, abarcan desde la religiosidad y el mundo funerario de Caspe, en la provincia de Zaragoza, a las influencias en el mundo itálico de Azaila, la cerámica y sus formas y decoración de Alloza, las actividades económicas de Oliete, la aristocracia y arquitectura ibéricas de Valdeltormo o los orígenes del mundo ibérico en Mazaleón, hasta las misteriosas lengua y escritura ibérica de Cretas, todos estos en la provincia de Teruel.
Los centros están repartidos por todo el recorrido de la ruta, en las poblaciones donde se encuentran los yacimientos. Se pueden ver maquetas y audiovisuales.
La Ruta de los íberos alcanza gran parte del territorio del Bajo Aragón histórico abarcando cuatro comarcas, Matarraña, Bajo Martín, Andorra-Sierra de Arcos y Bajo Aragón Caspe.