Concluye una nueva fase en la restauración de la iglesia de La Asunción

Linterna Capilla de San Pedro
Foto: CHUNTA ARAGONESISTA (CHA)
Actualizado: sábado, 15 agosto 2015 19:36

LONGARES (ZARAGOZA), 15 Ago. (EUROPA PRESS) -

   La nueva fase de restauración de la iglesia parroquial de Nuestra Señora de la Asunción de Longares (Zaragoza) ha concluido esta semana después de que se haya rehabilitado la fachada y las linternas de las capillas.

   Las obras en la restauración de la fachada noroeste de la nave del Evangelio han consistido en una limpieza general y la reparación de los morteros en las laves de atado y en las grietas intervenidas en anteriores actuaciones.

   Además, como estaba previsto, también se han restaurado las linternas de las capillas de San José y San Pedro, reponiendo las tejas vidriadas desaparecidas.

   El alcalde de Longares, Miguel Jaime Angós (CHA), ha destacado la actuación que están llevando a cabo, ya que "supone continuar con la labor de recuperación del elemento más importante del patrimonio histórico-artístico del municipio, en la que se han invertido más de 900.000 euros en los últimos treinta años".

   La restauración ha contado con un presupuesto de 40.000 euros y ha sido dirigida por la arquitecta Úrsula Heredia. La iniciativa es fruto de un convenio firmado entre el Ayuntamiento de Longares, la Diputación Provincial de Zaragoza (DPZ) y la Diócesis de Zaragoza, según el cual la DPZ aporta el 60 por ciento del total, y el resto a partes iguales entre el consistorio y la diócesis, según se recoge en una nota de prensa de Chunta Aragonesista (CHA).

LA ASUNCIÓN DE LONGARES

    La iglesia renacentista de La Asunción de Longares, declarada monumento histórico-artístico en 1967, fue construida en el siglo XVI. El templo esta compuesto por tres naves, siendo la central la de mayor tamaño.

   En su interior destaca un órgano y un pequeño museo con valiosas obras, como por ejemplo, dos libros de bautismo de los más
antiguos que se conservan en España, un Ecce-Homo y una Inmaculada de
Alonso Cano, una custodia barroca de plata sobredorada del siglo XVII
y una pila bautismal de cerámica de Muel del siglo XVI.

   Además, la iglesia tiene adosada la torre mudéjar, que está declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en el año 2001.