Concluyen dos décadas de excavaciones arqueológicas en abrigos prehistóricos de las Altas Cinco Villas

Concluyen dos décadas de excavaciones arqueológicas en abrigos prehistóricos de las Altas Cinco Villas.
Concluyen dos décadas de excavaciones arqueológicas en abrigos prehistóricos de las Altas Cinco Villas. - UNIVERSIDAD DE ZARAGOZA
Publicado: viernes, 20 agosto 2021 15:33

La colaboración de los vecinos contribuye a localizar algunos de los yacimientos

ZARAGOZA, 20 Ago. (EUROPA PRESS) -

Las campañas arqueológicas en la cuenca del río Arba de Biel, que han permitido identificar y estudiar un conjunto de asentamientos prehistóricos en las Altas Cinco Villas de entre hace 15.000 y 4.000 años, han concluido este verano, tras dos décadas de trabajo.

Los arqueólogos del grupo de investigación Primeros Pobladores del Valle del Ebro, Lourdes Montes y Rafael Domingo, que tienen su base en el Campus de Huesca de la Universidad de Zaragoza, han dirigido las excavaciones, que han permitido completar geográficamente el estudio de los modos de vida de esa época a lo largo de todo el Prepirineo, desde Álava a Cataluña, pasando por Navarra y la provincia de Huesca, que ya contaban con investigaciones previas.

Los nombres de los yacimientos son Legunova, Peña-14, Valcervera, Rambla de Legunova y Paco Pons y en ellos se ha excavado suelo en catorce niveles --dos de ellos funerarios--, con ocupaciones prehistóricas de distintas épocas, que abarcan siete periodos culturales diferentes --Magdaleniense, Aziliense, Sauveterriense, Mesolítico de muescas y denticulados, Mesolítico geométrico, Neolítico y Calcolítico-- y más de 10.000 años, ha informado la Universidad de Zaragoza en una nota de prensa.

Los arqueólogos han subrayado que estos yacimientos constituyen un "conjunto privilegiado" por la disponibilidad en un mismo valle de una amplísima secuencia de ocupación --se encuentran todos ellos en un radio de 10 kilómetros--, que hace posible analizar las distintas estrategias tecno-económicas adoptadas por aquellas comunidades, sus adaptaciones a un contexto medio ambiental cambiante y algunos rasgos de su evolución socio-cultural. También dan información sobre los modos de ocupación y explotación del territorio o a las relaciones de sus habitantes con otras regiones.

Los arqueólogos van a ofrecer, como cada año, un balance del trabajo de esta campaña este sábado, 21 de agosto, a los habitantes de las Cinco Villas, acto que tendrá lugar en el municipio de Biel. El Ayuntamiento de esta localidad, que ha dado todas las facilidades a los investigadores durante estas dos décadas, ha organizado una charla, a las 19.00 horas, en el castillo.

ANÁLISIS DEL MATERIAL

La UZ ha indicado que, a partir de ahora, Montes y Domingo deberán analizar las decenas de miles de piezas que han sido inventariadas durante las excavaciones. Se trata sobre todo de material lítico, como rascadores y otras herramientas de piedra elaborados con distintas técnicas, puntas de proyectiles de sílex, que no aparecen, sin embargo, en el Mesolítico, periodo de mayor expansión de la cubierta forestal, en el que quizá las puntas de flechas o lanzas fuesen también de madera.

También se ha localizado cerámica neolítica, adornos de conchas marinas procedentes del Mediterráneo, fruto de redes comerciales o de intercambio, así como restos de fauna que constituía parte de su alimentación, semillas e incluso, en este último año, bellotas, que formarían parte de su dieta, que se han conservado por estar carbonizadas.

Las excavaciones han revelado que todos los abrigos están bien orientados a sol naciente y muy cerca del río Arba o de cursos fluviales que les aseguraban acceso al agua, a materias primas líticas, como el sílex, que afloraba en Las Lezas junto al actual núcleo urbano de Biel, y que les permitía, posiblemente, controlar el paso de animales que siguieran el río en sus desplazamientos y lo utilizasen para abrevar.

Durante diez milenios, desde hace unos 15.000 hasta hace algo más de 4.500 años, hubo visitas recurrentes a este territorio, posiblemente de corta duración y realizadas por grupos humanos que vivirían en las zonas llanas que se abren al sur, en torno a la zona de las actuales Luna y Monlora.

Allí cazaban, de forma habitual ciervos, a lo largo de toda la secuencia cronológica estudiada, pero también caballos en los periodos más antiguos, además de bóvidos y animales de mediano tamaño ligados a entornos forestales o a zonas rocosas, como el corzo, el jabalí o la cabra montesa.

En las últimas fases, simultanearon la caza de especies salvajes con el pastoreo de ganado doméstico, principalmente cabras y ovejas. Probablemente, recolectaron también los abundantes recursos vegetales que les ofrecía el territorio, caracterizado por un paisaje mosaico en el que, como en la actualidad, alternaban manchas boscosas con zonas abiertas.

TRANSICIÓN CLIMÁTICA

Los arqueólogos han apuntado que estos yacimientos permiten seguir dos de los procesos más importantes de la Prehistoria: la transición climática entre el Pleistoceno y el Holoceno, que supuso notables modificaciones socio-económicas entre los grupos de cazadores-recolectores para adaptarse al cambio medioambiental; y la transición entre las sociedades cazadoras-recolectoras y las agropecuarias, ya avanzado el Holoceno, caracterizadas por la adopción de las especies domésticas al tiempo que mantenían parte de los modos de subsistencia cazadores.

Los resultados de estas investigaciones, que se han dado a conocer a la comunidad científica parcialmente a través de diversos artículos y de varias tesis doctorales, se recogerán en una o varias monografías con las que culminarán una vocación divulgativa que ha despertado a lo largo de estos años una colaboración ciudadana que ha hecho posible identificar estos abrigos.

Los directores de estas investigaciones han comentado que hasta hace apenas 40 años no se conocía nada de la Prehistoria antigua de la cuenca del Ebro. En el ámbito prepirenaico, la situación comenzó a cambiar gracias a la labor del equipo de investigación formado en el Museo de Huesca en torno a Vicente Baldellou a mediados de los años setenta, que se unió desde 1981 al que había aglutinado en la Universidad de Zaragoza Pilar Utrilla.

En la provincia de Huesca, se excavó en la cueva de Chaves, la Fuente del Trucho, Olvena, Gabasa, Puyascada y Forcón, que abrieron la vía para nuevos trabajos.

"Con ellos se ha ido formando un sólido corpus historiográfico" que permite conocer las ocupaciones humanas en ese territorio, desde el Magdaleniense antiguo, en yacimientos como Forcas o Cova Alonsé, hace unos 18.000 años, pasando por el Mesolítico, en Forcas, el Neolítico, en Chaves, uno de los yacimientos fundamentales del Mediterráneo occidental, y también en Forcas, Olvena, Puyascada y Forcón, y finalizando en las primeras edades de los Metales, en Forcas y Olvena.

PROVINCIA DE ZARAGOZA

La Prehistoria de la parte norte de la provincia de Zaragoza, sin embargo, era prácticamente desconocida hasta finales de los años noventa, dejando aparte algunos hallazgos de superficie sin contexto arqueológico.

Con el hallazgo, en 1998, de un abrigo rocoso a un kilómetro de Biel, que se denominó Peña-14, cambió el panorama y gracias a las excavaciones y a las charlas divulgativas en la localidad, que contribuyeron a que los vecinos fuesen aportando información sobre sitios con caracteres similares, se avanzó y desde el año 2000 se iniciaron trabajos en Paco-Pons, Legunova, Rambla de Legunova y Valcervera.

Numerosos investigadores de diversas áreas, entre ellos otros integrantes del grupo Primeros Pobladores del Valle del Ebro, como Manuel Bea o José Luis Peña, el geólogo del Campus oscense José Antonio Cuchí, además de jóvenes arqueólogos en formación que han podido desarrollar sus primeros trabajos científicos en estos enclaves, han ido aportando sus conocimientos y su dedicación en estos años.

Junto a la colaboración del Ayuntamiento de Biel y a los recursos del grupo de investigación, de la Universidad de Zaragoza y de distintas convocatorias científicas, los estudios han contado en varias campañas con aportaciones específicas del Gobierno de Aragón o de la Comarca de las Cinco Villas.