La consejera Fernández recalca la apuesta del Gobierno por la interculturalidad y la convivencia ante la inmigración

Actualizado: jueves, 23 julio 2009 20:03

BARBASTRO (HUESCA), 23 Jul. (EUROPA PRESS) -

La consejera de Servicios Sociales y Familia del Gobierno de Aragón, Ana Fernández, trasladó hoy la apuesta del Ejecutivo aragonés por la interculturalidad y la convivencia ante el fenómeno de la inmigración.

Así lo señaló Fernández en la clausura del curso de verano de la Universidad San Jorge 'Integración y transculturalidad: retos de una sociedad plural', que se ha celebrado en Barbastro (Huesca), según informó el Gobierno aragonés en un comunicado.

La consejera recordó que la presencia en estos últimos años "de nuevos vecinos de origen extranjero" ha configurado "poco a poco una nueva realidad social y cultural", que, probablemente, "constituyen una de las mejores oportunidades acaecidas en nuestra Comunidad autónoma en los últimos años".

No obstante, la titular de Servicios Sociales y Familia comentó que también supone un desafío, "ya que la interculturalidad es un objetivo que no surge de forma natural, es una meta que requiere apuesta intensa y trabajo por parte de todos".

En este sentido, se refirió a la apuesta por la interculturalidad y por la convivencia que realiza el Plan Integral para la Convivencia Intercultural en Aragón 2008-2011, que se marca como horizonte la convivencia y la ciudadanía, "el reto principal de una sociedad plural".

"Trabajar en la línea de un modelo intercultural significa que entendemos la diversidad como una fuente de enriquecimiento mutuo que nos hace más ricos y más libres", precisó Ana Fernández.

También resaltó la importancia de los agentes sociales en ese camino hacia la convivencia, como "garantes" de los derechos laborales y sociales de las personas inmigrantes, así como el apoyo social de las Organizaciones No Gubernamentales (ONG) y la red primaria de solidaridad, "que constituyen muchas de las asociaciones de inmigrantes".

"El objetivo final es lograr que los nuevos aragoneses y las nuevas aragonesas sientan que pertenecen a una comunidad y que sean reconocidos como miembros activos", subrayó la consejera, al tiempo que comentó que éste es el medio "para consolidar una sociedad plural y diversa asentada en los valores democráticos".