HUESCA, 2 Ago. (EUROPA PRESS) -
Cuatro de los cinco militares heridos este martes en Canfranc (Huesca), debido al desprendimiento de rocas durante unas prácticas de escalada, han sido dados de alta en el Hospital de Jaca. El quinto permanece ingresado en la Clínica Santiago de la capital altoaragonesa.
Según fuentes hospitalarias, el paciente se encuentra "estable y consciente". "En estos momentos debe permanecer en observación, al menos 24 horas, antes de que la traumatóloga valore las distintas fracturas que ha sufrido", han explicado las mismas fuentes a Europa Press.
En un primer momento, este soldado había sido atendido junto al resto de sus compañeros en el hospital jaqués, pero se ha decidido su traslado a la clínica para realizarle diversas pruebas de rayos X.
Este miércoles, a las 11.30 horas, tendrá lugar el funeral por el soldado Rubén Rangel Vizuete, de 25 años y natural de Elda (Alicante), fallecido en este accidente en Canfranc. Rangel pertenecía al Regimiento de Cazadores de Montaña 'Galicia 64', con base en Jaca, que acogerá el sepelio al que asistirá el ministro de Defensa en funciones, Pedro Morenés.
Rubén Rangel Vizuete ingresó en las Fuerzas Armadas en octubre de 2013 y el Regimiento de Cazadores de Montaña 'Galicia 64' era su primer destino. En el año 2015 estuvo desplegado en Afganistán y era poseedor de la medalla OTAN por su participación en la operación 'Apoyo resuelto'.
El accidente en Canfranc ha tenido lugar sobre las 11.30 horas durante unas prácticas de escalada que estos militares se encontraban realizando en una zona denominada 'Canteras', en 'Coll de Ladrones' y cercana a la carretera N-330. Según el Ejército, y a falta de una investigación posterior, se habría producido un desprendimiento de rocas que habría alcanzado a los componentes de la cordada que realizaba los ejercicios.
El alcalde de Canfranc, Fernando Sancho ha lamentado el accidente y ha asegurado que el pueblo se siente "consternado e impactado". "Era un chico muy joven y es un situación muy dura", ha añadido Sancho. La carretera N-330 se ha reabierto al tráfico después de retirar las rocas.
