TERUEL 13 Ene. (EUROPA PRESS) -
La Diputación de Teruel (DPT), continuando con su política de apoyo al sector ganadero turolense, ha suscrito hoy los convenios de colaboración correspondientes al "Programa de mejora genética ovina de las razas ojinegra, cartera y maellana".
Dicho Programa está dotado con un presupuesto global de 25.000 euros y beneficiará a un total de 23 explotaciones ovinas, ubicadas en 16 localidades. Al acto de firma de los documentos, desarrollado a las 11 horas en el salón de plenos de la Diputación de Teruel, han asistido el presidente y el vicepresidente 3º de la Diputación de Teruel, Miguel Ferrer y Antonio Arrufat, respectivamente.
La importancia de esta fórmula de trabajo reside en el hecho de que, gracias a la distribución de los mejores reproductores entre las ganaderías de la provincia, se impulsa la mejora genética de dicha razas y la uniformidad del producto final.
La Diputación de Teruel actúa en el sector ovino mediante tres líneas básicas: la mejora genética, que permite la obtener incrementos de producción e incentiva la uniformidad; otra vía es la mejora de las estructuras de producción y la tercera vía de trabajo es el fomento a la promoción del Ternasco de Aragón.
Recientemente, la Institución provincial ha acordado seleccionar un total de 23 explotaciones ganaderas de las razas ojinegra, cartera y maellana de la provincia. Dichas ganaderías se encuentran ubicadas en las localidades de Alacón, Berge, Bordón, Castellote, Cortes de Aragón, Cuevas de Cañart, Gargallo, Ladruñán, Molinos, Seno, Allepuz, Cantavieja, Fortanete, Linares de Mora, Mosqueruela y Valdeltormo.
COLABORACION EN MATERIA DE MEJORA GENÉTICA
El "Programa de mejora genética ovina de las razas ojinegra, cartera y maellana" fue aprobado por la Diputación de Teruel en abril de 2005. Su objetivo es sumar las actuaciones que, en dicha materia, realiza la Corporación provincial conjuntamente con las explotaciones ganaderas colaboradoras. Este programa de mejora ovina complementa el que ya existe para la raza Rasa Aragonesa, mayoritaria entre la cabaña ganadera provincial.
Con ambos programas se trata de impulsar la cría de las razas autóctonas y aumentar la calidad de los animales con actuaciones encaminadas a incrementar los índices de prolificidad, aumentar la fertilidad y reducir los costes de producción y mantener y mejorar la pureza de la raza.
Las 23 explotaciones ganaderas turolenses que participan en el citado Programa, han formalizado hoy contratos de colaboración con la Diputación de Teruel por un período de cuatro años. Según se indica en las cláusulas de los citados documentos, se comprometen llevar a cabo un control de producciones y participar en programas de mejora genética. Asimismo, deberán poner a disposición de los Servicios Agropecuarios de la Diputación de Teruel corderos destinados a futuros reproductores.
Por otro lado, deberán asistir a ferias y otros eventos, y someterse a los controles pertinentes relativos a saneamiento y programas vacunales que permitan mantener a su ganadería indemne frente a enfermedades como la brucelosis, el Maedi-Visna o el Scrappie.
La Diputación de Teruel, por su parte, les prestará la asistencia técnica necesaria para el correcto estado sanitario de los animales de la explotación y la consecución de los objetivos de selección y mejora genética. También garantiza el uso de sus instalaciones agropecuarias para la recría de corderas. El personal especializado de la Diputación de Teruel es el encargado de realizar los controles a lo largo de los cuatro años de colaboración estipulados.
Las ayudas económicas anuales de la DPT a las mencionadas explotaciones colaboradoras oscilarán entre un mínimo de 500 euros y un máximo de 1.500 euros. También se sufragarán por la DPT los gastos que se generen en concepto de transporte y manutención de aquellos animales que asistan a concursos y exposiciones en ferias agropecuarias y otros eventos ganaderos.
El fruto de este trabajo, desarrollado desde hace más de veinte años por la Diputación de Teruel con el sector ovino, se ha traducido en una mejora de los estándares raciales, de los índices de prolificidad y fertilidad de las diferentes razas autóctonas, como la ojinegra, la maellana o la cartera, así como la rasa aragonesa. Todo ello ha permitido el mantenimiento de algunas de ellas que estaban en peligro de extinción, el incremento de los censos y la mejora del producto final comercializado.
Aunque en la provincia de Teruel la raza Rasa Aragonesa es claramente mayoritaria en la cabaña de ovino, también existen explotaciones ganaderas inscritas en los libros genealógicos de las razas autóctonas ojinegra (57 explotaciones con un censo de 30.000 ovejas), cartera (24 explotaciones con un censo de 9.000 ovejas) y maellana (7 explotaciones con un censo de 2.700 ovejas).