La fiesta de los Mayos recupera todos los años en Albarracín la costumbre de cortejar a las mujeres solteras

Actualizado: domingo, 22 abril 2007 17:23

ALBARRACÍN (TERUEL), 22 Abr. (EUROPA PRESS) -

La fiesta de los Mayos, que se celebra la noche del 30 de abril en la localidad turolense de Albarracín, recupera cada año la tradición de cortejar a las muchachas solteras, las "mayas", naturales de la localidad, según informó a Europa Press el empresario hostelero albarracinenese conocido como José Miguel 'El Gato'.

La celebración se reparte en varios días, y comienza la última noche de abril con la elaboración de una lista de las mujeres solteras del pueblo por parte de los mayos, los solteros. "Se hace entonces una subasta en la plaza, donde, si sabemos que hay alguien interesado en una de las chicas, nos dedicamos a picarle, para que apueste más dinero", explicó 'El Gato'.

Después, la tradición marca que los chicos, organizados en una rondalla, vayan casa por casa de las solteras a cantarles las jotas conocidas como 'Mayos'. 'El Gato' indicó que "son versos de más de veinte estrofas, que describen a la mujer desde el pelo hasta los pies". En todos los casos es la misma canción, sólo cambia la última estrofa, donde se incluye el nombre del chico.

"Antiguamente, si la chica estaba interesada en el mozo, a la mañana siguiente salía a la calle con la mantilla bien colocada; si se la ponía al revés, signuificaba que no le había gustado la propuesta", indicó. Pero esa parte de la tradición se ha perdido, "ahora nos vamos todos juntos a celebrarlo, y las chicas por supuesto ya no llevan mantilla", aseguró.

La segunda parte de la fiesta tiene lugar la siguiente semana, cuando la rondalla, acompañada también por los solteros que no pertenecen a ella, va otra vez de casa en casa cantando jotas y pidiendo huevos a las madres de las mayas. "Antes los huevos estaban pintados y contenían mensajes, pero ahora eso ya no se hace", manifestó 'El Gato'. La docena de huevos es sólo "una excusa" para que las madres y las propias mayas inviten a almorzar a todos los mozos.

La noche del 23 de junio, San Juan, se colocan las llamadas 'enramadas' en los balcones. 'El Gato' explicó que "los chicos regalan a las mayas flores, arcos con hiedras o caramelos, que la maya se encarga de colocar en su ventana o balcón".

Con el dinero recaudado con la subasta del 30 de abril y con la venta de los huevos, el fin de semana siguiente a la celebración de San Juan --23 de junio-- se organiza una merienda para todos los solteros y solteras del pueblo.

En cuanto a la cantidad de gente que participa en la celebración, 'El Gato' aseguró que "está muy masificado, sobre todo la plaza se pone hasta arriba". "Algunos aspectos de la tradición se han perdido, pero la fiesta de los Mayos sigue estando muy viva en Albarracín", concluyó.