TERUEL, 22 Abr. (EUROPA PRESS) -
El Ministerio de Fomento ha licitado hoy, con su publicación en el Boletín Oficial del Estado (BOE), el contrato de consultoría y asistencia para la redacción del proyecto de instalación de marquesinas y adecuación de zonas peatonales en estaciones y puntos localizados de la línea ferroviaria que une Teruel y Zaragoza. El presupuesto de licitación es de 96.161,94 euros y el plazo de ejecución de seis meses.
El objetivo del contrato consiste en la definición de los trabajos necesarios para la instalación de marquesinas, refugios para los pasajeros y soluciones al acceso, tanto peatonal como en vehículo rodado, a las estaciones del tramo que une las ciudades de Teruel y Zaragoza, ambas excluidas, que han sido objeto de adaptación a las altas prestaciones.
Asimismo, el contrato definirá diversos detalles funcionales y de acabado homogéneos en todas ellas. Este proyecto forma parte de las actuaciones que el Ministerio de Fomento está realizando para la mejora de la conexión entre Teruel y Zaragoza, que quedará integrada en el corredor Cantábrico-Mediterráneo de altas prestaciones previsto en el Plan Estratégico de Infraestructuras y Transportes (PEIT).
Según informa el Ministerio de Fomento en un comunicado, el desarrollo de estos trabajos está ya muy avanzado. Así, de los 173 kilómetros que separan Teruel de Zaragoza se encuentran en servicio los tramos Muel-Zaragoza (16 kilómetros) y Cella-Villafranca del Campo (29).
En estado avanzado de ejecución se encuentran las obras de 36 kilómetros correspondientes a los tramos Villafranca del Campo-Caminreal y Cariñena-Muel. Por otra parte, en el BOE del pasado 14 de marzo se publicó el anuncio de la licitación de las obras correspondientes al tramo Teruel-Cella, con un presupuesto base de 54,7 millones de euros y un plazo estimado de 30 meses.
Asimismo, se ha adjudicado recientemente la primera fase de las obras para la ejecución de las instalaciones de Seguridad y Comunicaciones, con un presupuesto de 25,3 millones de euros y un plazo de 18 meses. El objetivo de esta actuación es dotar de instalaciones de seguridad y comunicaciones a los tramos de la bifurcación Teruel-Villarreal de Huerva (69 kilómetros) y Caminreal-Santa Eulalia (32), dentro de lo que se ha denominado fase I.
Las obras que el Ministerio de Fomento está realizado entre Teruel y Zaragoza afectan tanto a la infraestructura del trazado, como a la superestructura de vía e instalaciones de seguridad y comunicaciones, explican desde el ministerio.
Además, recuerdan que está prevista la supresión de todos los pasos a nivel en la línea, lo que redundará en una mayor seguridad y comodidad para los usuarios del ferrocarril y para los habitantes de las zonas próximas. Asimismo, con las nuevas obras de drenaje se conseguirá la práctica eliminación de las inundaciones en la zona próxima a la vía y de las fincas situadas aguas arriba.
Las nuevas instalaciones de seguridad también permitirá un incremento de frecuencias lo que redunda en más calidad del servicio ferroviario. En un futuro, las actuaciones que ahora se están realizando en la línea Teruel-Zaragoza quedarán integradas en el corredor de alta velocidad Cantábrico-Mediterráneo, recogido en el PIET.
Finalmente, desde el Ministerio de Fomento precisan que el tiempo que será necesario invertir en el trayecto entre Teruel y Zaragoza, una vez concluidas las obras de estos cuatro primeros tramos, podrá reducirse en torno a 40 minutos, en función del tipo de material rodante.
Así, el conjunto de mejoras hará posible, una vez concluya toda la actuación, una oferta ferroviaria mucho más atractiva, equiparable en tiempos de viaje, frecuencia de servicios, confort y seguridad a las mejores existentes hoy en día en Europa, aseguran desde el Ministerio de Fomento.
