ZARAGOZA, 15 Sep. (EUROPA PRESS) -
Izquierda Unida ha exigido a la Comisión Europea un plan europeo que garantice la viabilidad de la empresa automovilística Opel, después de que General Motors (GM) anunciara la semana pasada la venta del 55 por ciento de Opel al fabricante canadiense de componentes para vehículos Magna.
El plan de Magna y de su socio ruso Sberbank contempla la eliminación de 10.500 empleos en Europa, de los que alrededor de 1.700 despidos corresponderían a la planta de Figueruelas (Zaragoza), teniendo en cuenta que la producción asignada para la planta aragonesa se reduciría a 320.000 unidades.
IU considera que la crisis de la industria automovilística Opel es de carácter "supranacional" y, por ello, la solución a sus problemas "debería estar liderada por la Unión Europea". En este sentido, el coordinador general de IU Aragón, Adolfo Barrena, que "en todo momento" está en comunicación con el eurodiputado de IU, Willy Meyer, lamentó la "tardanza" en reaccionar del Gobierno español.
"Es incomprensible tener noticias de que gobiernos como los de Bégica o Reino Unido están permanentemente en Bruselas mientras el de José Luis Rodríguez Zapatero está todavía pensando por donde empieza", criticó.
Así, "una vez más, exigimos una acción rápida, decidida y contundente para forzar a Magna una negociación de un plan industrial que anteponga el interés general y sea negociado con todos los Estados y todos los sindicatos de todas las plantas de Opel en Europa", aseveró Barrena.
A su juicio, "no es aceptable la prepotencia con la que Magna insiste en dejar a miles de trabajadores en la calle y sus intenciones, aunque le parezcan bien al Gobierno alemán, merecen una contundente movilización de rechazo y exigencia de negociación. A esa movilización emplazamos al Gobierno español, al Gobierno de Aragón y a los trabajadores".
Por otra parte, el coordinador general de IU Aragón lamentó que se haya suspendido la reunión que iban a mantener hoy en Madrid representantes del Ejecutivo aragonés y del Ministerio de Industria.
"Hoy, que se podría haber avanzado con relación a la planta de Opel en Figueruelas con la reunión del ministro de Industria con representantes del Gobierno de Aragón y representantes sindicales de UGT y CC.OO., vemos como suspenden el encuentro para viajar a Berlín y participar en una reunión convocada por el Gobierno alemán", apunta.
Con este tipo de decisiones, en su opinión, "los Gobiernos español y aragonés legitiman al Gobierno de Angela Merkel de ser el interlocutor, cuando la crisis de la industria automovilística Opel es de carácter supranacional y debería estar liderada por la Unión Europea".
