El Museo del Pan de La Hoz de la Vieja rinde tributo a la cultura del pan, casi tan antigua como la de la humanidad

TERUEL 8 Abr. (EUROPA PRESS) -

El Museo del Pan de la localidad turolense de La Hoz de la Vieja rinde tributo a la cultura del pan, casi tan antigua como la de la humanidad.

Esta cultura ha sido uno de los ejes sobre los que giraba la vida cotidiana del hombre y la mujer del campo, cuyas vivencias quedan reflejadas en el museo, que transmite toda la dureza y satisfacción de esta esencial tarea.

El Museo del Pan esta emplazado en un horno de leña de uso comunal, de una sola planta de alrededor de 70 metros cuadrados, y en la que llama la atención la gran altura de su techo de madera, de aproximadamente 7 metros de altura.

Las paredes del recinto son de piedra, construidas con barro y lucidas con yeso, mientras que la parte del horno es una bóveda de ladrillo cerrada por dos compuertas de hierro. Los tableros en los que se masaba, instalados en dos alturas por encima del suelo, arropan la zona de trabajo.

Y ya en las paredes empieza el largo camino sobre el proceso de elaboración del pan, que pasa por todas las fases del mismo, desde la siembra del trigo hasta la cocción del pan y dulces típicos de la localidad.

La Asociación Cultural "La Foz y el Castiello" y el Ayuntamiento de La Hoz de la Vieja restauraron lo que era el antiguo horno de leña del pueblo para instalar este Museo, en el que además pueden verse los utensilios usados como palas para introducir el pan en el horno, moldes para dar forma a los dulces, entre otros.

También se exponen herramientas de labranza relacionadas con el cultivo del elemento base del pan: el trigo. Así, se muestran varios tipos de gavillas, una aventadora, arados, trillo, canastas o medidas para el trigo, entre otras herramientas del labrador.

A todo ello se unen las explicaciones ofrecidas por un vecino de La Hoz de la Vieja, imprescindibles para conocer estos utensilios, su utilidad, y su forma de usarlos.

También se exhibe un audiovisual, con música de dulzainas e imágenes que sumergen al visitante en las actividades de las gentes de un tiempo lejano pero también cercano en el recuerdo. Lo mismo que puede contemplarse, por otra parte, en la exposición de fotografías antiguas que alberga un edificio cercano a este Museo.

El horno se cerró alrededor de los años 50 a causa de la despoblación de esta localidad. Con los años albergo una peña juvenil. La ayuda de la gente del pueblo, a través de la donación de sus utensilios y herramientas, sirvió para llevar a cabo el proyecto del Ayuntamiento y la Asociación.

La visita guiada al Museo ofrece una proyección de diapositivas, con una duración de entre 30 y 40 minutos, y también pueden visitarse dos exposiciones permanentes, una de fotografías antiguas y otra de plantas autóctonas, con una duración de cerca de media hora.

Las entradas cuestan 2 euros (menores 7 años gratis). Para grupos de más de 15 personas tienen un precio de 1 euro. La Hoz de la Vieja se encuentra ubicada a mitad de camino entre Zaragoza y Teruel, en el piedemonte suroriental de la sierra del Cucalón, a 932 metros de altitud.