TERUEL, 18 May. (EUROPA PRESS) -
El Museo de Teruel ha decidido prorrogar, hasta el próximo 28 de mayo, el cierre de la exposición "Isidro Ferrer, ni crudo ni cocido", inicialmente previsto para el día 21 de mayo. Más de 4.600 personas han visitado desde su apertura, el pasado 30 de marzo, una exposición que ha logrado captar el interés de cuantos la recorren y que ha se ha convertido en un exitoso testimonio de las posibilidades que encierra el turismo cultural.
"Isidro Ferrer, ni crudo ni cocido" es una muestra antológica del trabajo creativo que el citado diseñador gráfico ha venido realizando durante los últimos seis años. Coproducida por el Museo de Teruel, esta exposición permite descubrir la originalidad y la modernidad que presiden la trayectoria de uno de los diseñadores gráficos mas valiosos del actual panorama artístico español. Carteles, pequeñas esculturas, ilustraciones para diarios, juegos, trofeos, portadas de libros, publicaciones, son algunos de los múltiples materiales que integran una exposición muy atractiva para el espectador y que llega al Museo de Teruel tras ser contemplada en el Centro Cultural de España en México.
El título de la muestra es, no por casualidad, "ni crudo ni cocido". Una expresión que define muy bien las obras de Isidro Ferrer "por cuanto pueden observarse como si tuviesen un aspecto exterior algo crudo y un contenido interno muy cocido. Porque Isidro Ferrer es un diseñador que reflexiona bastante sobre la naturaleza y la cultura y es capaz de sacar a la luz obras inteligentes que permiten ver las cosas como nunca antes habían sido vistas", señalan los organizadores.
Isidro Ferrer (Madrid, 1963) combina su actividad de diseñador gráfico con una intensa labor en otros campos de la imagen como la ilustración, la realización de cómics, animaciones para televisión, o la edición.
Cuenta Isidro Ferrer con más de 20 libros publicados entre Francia, Portugal y España. Su obra ha sido objeto de exposiciones individuales en Huesca, Gijón, Lisboa, Rouen, Rijeka, Bogotá, Quito, México, Turín y París. También ha participado en diversas colectivas realizadas en ciudades como Madrid, Barcelona, París, Tokio, Berlín, Bruselas, México, Montevideo, La Habana y Buenos Aires.
Ha recibido varios premios por su trabajo como ilustrador y grafista, entre ellos: 1996, Premio Lazarillo de Ilustración; 2000, Premio Promax oro de animación para TV (Canadá); Premio Laus de Ilustración; 2001, 3er. Premio en el XII Festival Internacional de Carteles de Chaumont (Francia); 2002, Premio Nacional de Diseño; 2003, Premio "Daniel Gil" de edición y premio Experimenta. Desde el año 2000 es miembro de la Alianza Gráfica Internacional.
UNA NUEVA MIRADA SOBRE LA REALIDAD
La sólida, fructífera y atractiva trayectoria artística de Isidro Ferrer bien merecía la sugerente retrospectiva que aún puede contemplarse durante una semana más en el Museo de Teruel. Una iniciativa necesaria que nos muestra la plural e inspirada labor de un artista gráfico que, afincado desde 1996 en Huesca, ha sabido crear mundos propios y lenguajes universales en los que la imaginación, la fuerza de los símbolos y la sutileza forman un feliz y productivo maridaje creativo. Sus propuestas gráficas son siempre originales y sorprendentes. Es, por todo ello, uno de los diseñadores más interesantes de la actualidad.
Gran renovador, Isidro Ferrer está siempre dispuesto ofrecernos con su trabajo una nueva y comprometida mirada sobre la realidad. Parte de una tradición muy española, popular y amante de la mezcla de objetos dispares que, en su singularidad, se vuelve universal, enlazando con las propuestas de los surrealistas y dadás más juguetonas, de Calder a Schwitters.
Por otra parte, esta exposición permite una más completa aproximación a la rica y plural obra de un creador que era ya bien conocido por un buen número de turolenses. Baste recordar que Isidro Ferrer fue el responsable del diseño y maquetación de aquel renovado y atractivo Boletín Informativo de la Diputación de Teruel que, desde mediados de los años ochenta y hasta 1991, batió récords de audiencia. Y que también elaboró durante aquella época, carteles y otros materiales divulgativos de la actividad institucional de la Diputación de Teruel.
Pero, sin duda, entre las tareas que vinculan permanentemente a Isidro Ferrer con Teruel, se encuentra su dilatada colaboración como ilustrador con la revista cultural Turia.
Esta exposición permite descubrir, a fondo, los múltiples recursos de un ilustrador de formación autodidacta y que cuenta ya con envidiable currículo nacional e internacional. Un artista que siente verdadera pasión por su trabajo y que lo ejerce con rabioso sentido de la independencia y de la modernidad. Pero todo ello construido sin dogmas, sin etiquetas. A la intemperie. Con rigor, con calidad, Isidro Ferrer viene fabricando imágenes novedosas, frescas, insólitas.
