El Museo de Zaragoza muestra la restauración de siete cascos celtibéricos e inicia un programa para difundir su valor

El presidente de Aragón, Javier Lambán,el consejero de Cultura, Felipe Faci, la directora general de Bellas Artes, María Dolores Jiménez- Blanco y el director del Museo de Zaragoza, Isidro Aguilera.
El presidente de Aragón, Javier Lambán,el consejero de Cultura, Felipe Faci, la directora general de Bellas Artes, María Dolores Jiménez- Blanco y el director del Museo de Zaragoza, Isidro Aguilera. - EUROPA PRESS
Publicado: jueves, 1 julio 2021 15:21

ZARAGOZA, 1 Jul. (EUROPA PRESS) -

El Museo de Zaragoza ha abierto este jueves, 1 de julio, una pequeña exposición para mostrar a todos los visitantes los siete cascos celtibéricos recuperados tras el expolio del yacimiento de Aratis, en Aranda de Moncayo (Zaragoza).

Colocados en una vitrina, estas piezas excepcionales sirven como instrumento para explicar la sociedad celtíbera, así como para difundir y profundizar en su valor histórico.

El presidente del Gobierno de Aragón, Javier Lambán, ha sido el encargado de descubrir este nuevo espacio museístico, que se ha documentado con grafismos, un audiovisual y textos ilustrativos de su función, significado y contexto histórico arqueológico.

Lambán ha estado acompañado de la directora general de Bellas Artes, María Dolores Jiménez-Blanco; la subdirectora general de Museos, Carmen Jiménez; la subdirectora del Instituto de Patrimonio Cultural de España, Ana Cabrera; el consejero de Educación, Cultura y Deporte, Felipe Faci, los directores generales de Cultura y de Patrimonio, Víctor Lucea y Marisancho Menjón, respectivamente.

También han estado presentes el director del Museo de Zaragoza, Isidro Aguilera; el alcalde de Aranda del Moncayo, José Javier Jordán; el coleccionista Christian Levett; y los coordinadores del libro sobre los cascos: Ricardo González Villaescusa, profesor en la Universidad de París-Nanterre, y Raimon Graells, profesor-investigador en la Universidad de Alicante.

Tras diez años de estudio y restauración de los casos, estos quedan integrados en la exposición permanente de la sección de arqueología del Museo de Zaragoza, gracias al trabajo conjunto para su recuperación efectuado por la Embajada de la Unesco en París, el Ministerio de Cultura, el Ejecutivo autonómico y otras instituciones, tras el depósito realizado por Christian Levett, fundador del Museo de Arte Clásico de Mougins, donde se encontraban expuestos previamente.

Este coleccionista decidió donarlos tras constatar que provenían de un expolio acreditado judicialmente y, después, entregó otro casco en su poder, que resultó ser una copia actual hecha de latón, por lo que no se ha integrado en la exposición.

El presidente del Gobierno aragonés, Javier Lambán ha agradecido a Levett su aportación ya que "es el origen de todo, de este feliz regreso a casa" para ampliar la "excepcional" colección de esta galería.

"Es obligación del Gobierno ayudar a que la ciudadanía conozca mejor ese pasado y difundirlo y lo sienta suyo. Yo no creo que la historia nos dé derechos, los derechos los da la Constitución, pero la historia nos constituye", ha comentado.

Asimismo, Lambán ha adelantado que, dentro de la apuesta que el Ejecutivo de la comunidad está haciendo por los museos, esta exhibición de los cascos es un "hito fundamental" y "preludio" de otras acciones que van a desarrollarse y que "han reanudado el interés por el mundo celtibérico".

En esta línea, ha avanzado que en diciembre, se inaugurará un Coloquio Internacional sobre expolio y tráfico ilícito del Patrimonio Cultural que reunirá en Zaragoza a los principales especialistas europeos en el tema, analizando las redes del tráfico ilícito, así como las estrategias y los procedimientos en la lucha contra esta lacra.

Estas jornadas se organizan con la intención de poner en común distintas experiencias y enfoques en la lucha contra el expolio y el comercio ilícito de piezas arqueológicas, implicando a todos los agentes e instituciones concernidas, para diseccionar con detalle el problema y proponer vías de solución reales y prácticas. Está organizado por el Gobierno de Aragón y colaboran la Brigada de Patrimonio Histórico de la Policía Nacional, la Sección de Patrimonio Histórico de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil y la Universidad de Zaragoza.

Además, ha comentado que a finales de 2022, se desarrollará una exposición que llevará por título de 'Guerra, religión y mito'. Esta tendrá tres sedes, de manera simultánea: los Museos de Zaragoza, de Teruel y el Numantino de Soria, para reforzar el concepto territorial de la cultura celtibérica y sus distintas vertientes. Asimismo, la muestra difundirá la importancia del yacimiento de Aratis, con una muestra complementaria en la propia localidad de Aranda del Moncayo.

Además, Lambán ha recordado que este mismo jueves ha comenzado una campaña de excavación en el yacimiento de Aratis, que sufragará la Administración autonómica.

En esta jornada, se ha presentado el libro 'El retorno de los cascos celtibéricos de Aratis. Un relato inacabado', una monografía que repasa las características de las piezas y su relevancia en la historia cultural del mundo celtibérico. El escrito aborda el periplo sufrido por las piezas desde su expolio a finales de los años 80 hasta su recuperación, acompañado de algunas reflexiones sobre el mercado del arte.

RECUPERACIÓN DEL PATRIMONIO

El presidente ha aprovechado también para resaltar el esfuerzo hecho por el Gobierno regional para la recuperación del patrimonio, recordando "grandes éxitos" con el retorno de los bienes de Sijena, los pertenecientes a la Diócesis de Barbastro-Monzón o los propios cascos que ya puede ver el público.

También ha agradecido la cesión por parte del Ministerio de Cultura de estas siete piezas al Museo de Zaragoza, así como su inversión para la remodelación del vallado y el atrio, cuya inversión ha ascendido al medio millón de euros.

Por su parte, la directora general de Bellas Artes, ha coincidido con Lambán en que una de las principales misiones de las Administraciones debe ser "proteger, conservar, investigar y dar a conocer el patrimonio de nuestro país" y ha reeditado su compromiso con el Museo, tras esta intervención realizada que, en sus palabras, "otorga al conjunto un aspecto más moderno, con una zona de acceso renovado y accesible".

Sobre los cascos, ha declarado que cada institución debe poner cuanto está en su mano para lograr la recuperación de los bienes culturales y para luchar contra el tráfico ilícito. "Años de investigaciones y acciones judiciales han servido para conseguir que hayan llegado estas piezas que se inauguran hoy", ha concluido.

PROCESO

El director del Museo de Zaragoza, Isidro Aguilera, ha indicado cómo el centro ha realizado el proceso técnico y multidisciplinar para determinar la veracidad de las piezas.

El ingreso de los nuevos vestigios ha exigido la aplicación de protocolos previos para determinar su estado de conservación y su grado de autenticidad.

Se ha realizado una documentación fotográfica exhaustiva y un examen macroscópico para determinar sus características y detectar patologías; se ha documentado bibliográficamente para ayudar a su contextualización histórica y se ha fotografiado los cascos con luz ultravioleta para detectar pigmentos ajenos a la patina natural.

Además, se han hecho tadiografías para determinar qué partes del casco son metálicas y las diferentes densidades del metal y aportan información sobre los diversos fragmentos que los componen y las técnicas empleadas para su ensamblado y se ha puesto en marcha un análisis por fluorescencia de rayos X, que indican qué tipo de aleación contienen las diferentes partes de los cascos y la proporción de cada metal empleado.

Los resultados del trabajo en los siete cascos entregados por el Ministerio de Cultura, no así del octavo que se recibió posteriormente, han determinado que las piezas han sufrido intervenciones con el ánimo de dotarlas de un aspecto lo más parecido al que tendrían en la época. Se trata de una reproducción moderna que sí tiene partes de bronce binario, empleado por los celtíberos.

Además, Aguilera ha informado de que al Museo han llegado en las últimas semanas otros dos cascos donados por dos particulares, uno de Zaragoza y otro de Barcelona, de los que se está realizando la correspondiente analítica para comprobar su aleación y grado de reintegración.