El patrimonio artístico de la DPZ, en 'Legado de Saura a Ribera'

Presentación de la exposición 'Legado de Saura a Ribera'  de la DPZ
Foto: EUROPA PRESS
Actualizado: miércoles, 7 octubre 2015 15:49

ZARAGOZA, 7 Oct. (EUROPA PRESS) -

   El Palacio de Sástago acoge la exposición 'Legado de Saura a Ribera. Coleccionismo de la Diputación Provincial de Zaragoza', que supone un paseo, desde el Renacimiento hasta el arte contemporáneo, por las principales piezas del patrimonio artístico de la institución, que normalmente no están expuestas al público.

   A la presentación de la colección, este miércoles en la DPZ, han asistido la diputada delegada de Cultura, Cristina Palacín; el coordinador de Proyectos y Difusión Cultural, Ricardo Centellas, y el conservador de las colecciones artísticas de la DPZ, José Calvo Ruata.

   La exposición, que se inaugura este jueves, 8 de octubre, y se podrá visitar hasta el próximo 10 de enero de 2016, "fija la atención en artistas aragoneses o en aquellos que han tenido una vinculación con la institución", ha resaltado Palacín.

   Se trata de una muestra "heterogénea y variada", formada por un total de 65 obras, entre las que hay pinturas, esculturas, grabados y cerámica, que está distribuida en dos plantas, ha señalado Ricardo Centellas.

   En la primera planta del Palacio de Sástago se pueden ver una serie de "retratos modernos", entre los que destaca el del presidente del Casino de Zaragoza, Francisco de la Sota, realizado por Justino Gil Bergasa (1890-1936) y los de mecenas y patronos de instituciones benéficas como Manuel Dronda, pintado por Juan José Gárate (1869-1939).

   En la planta inferior se exhiben, en función de la época, obras de José de Ribera, Mariano Barbasán, Francisco de Goya, Francisco Marín Bagüés, Antonio Saura o Víctor Mira, entre otros.

   Sin embargo, por razones de tamaño y de coste económico no ha sido posible incluir los originales de otros dos grandes referentes del patrimonio cultural de la Diputación como es la escultura 'El profeta' de Pablo Gargallo, que se encuentra en el museo Pablo Gargallo, y las escenas religiosas que Giacinto Brandi pintó en el interior de la iglesia del hospital de Nuestra Señora de Gracia.

LAS SALAS

   En el espacio 'La Fortuna del Hombre' se encuentran las piezas más antiguas de la muestra. El coordinador de Proyectos y Difusión Cultural, Ricardo Centellas, ha resaltado las puertas del retablo mayor de Veruela de 1551, en las que aparecen los retratos de los abades Hernando de Aragón y Lope de Marco, y en cuya escultura y mazonería intervinieron Juan Pérez Vizcaíno, Miguel Peñaranda y, posiblemente, Pedro Moret.

   En el sala 'Pasión por Italia', reservado para las obras del Barroco, la pintura destacada ha sido el 'San Jerónimo penitente', atribuido al taller de José de Ribera (1591-1652), y que fue un cuadro de las colecciones reales depositado en el monasterio de El Escorial.

   'La nueva sensibilidad romántica. De Goya a la pintura de historia' es la sala que alberga las obras renacentistas, donde se ha hecho especial hincapié en la obra del zaragozano Mariano Barbasán, 'Don Pedro III el Grande en el collado de las Panizas', de 1891, que refleja al rey aragonés "mirando altivo la expulsión de los franceses de la Corona de Aragón", ha puntualizado Centellas.

   También en esta sala se ofrece un libro de grabados "inéditos" del pintor Francisco de Goya, de los que la DPZ tiene "la práctica totalidad" de la obra. No obstante, del ejemplar completo sólo se muestra el grabado 'Disparate de la Bestia'.

   En el patio del Palacio de Sástago, el espacio denominado 'Hacia la modernidad', se exhiben piezas como la escultura de un torso femenino de Félix Burriel, y el 'Milagro de las Rosas', del pintor Francisco Marín Bagüés, donde se puede ver a la hija del rey Pedro III de Aragón, Santa Isabel de Portugal, "patrona de la provincia de Zaragoza", con su habitual ofrenda de "panes o dinero" convertida en flores.

   La sala de Arcos, que ha recibido el nombre de 'Arte de nuestro tiempo', expone las piezas de arte Contemporáneo y está presidida por la "obra estrella" de la muestra, la 'Gran Crucifixión' de Antonio Saura.

   Un cuadro de cuatro metros de largo, que "estuvo en el museo Reina Sofía durante seis años, y que ha sido escogido como portada del catálogo de la exposición", ha apuntado Centellas.

   Asimismo, el espacio alberga obras como la escultura de la cabeza de Pablo Picasso, del año 1913, de Pablo Gargallo, 'La conspiración' de José Manuel Broto, o 'Estilita y explosión atómica', de Víctor Mira.

COLECCIÓN DE LA DPZ

   La colección de la DPZ tiene un total de 3.331 obras que se han ido adquiriendo a lo largo de su historia, a través de la compra de inmuebles que contenían dichas piezas en su interior, y también, mediante el pensionado de artistas, "primero en París y luego en Roma", a los que se les pedía una obra a cambio de su beca, ha relatado el conservador de las colecciones artísticas de la DPZ, José Calvo Ruata.

   Una labor que se continúa haciendo en la actualidad, becando a artistas, cada dos años, para asistir a la Casa de Velázquez de Madrid, que es uno de los centros "más prestigiosos en creación e investigación" artística de España.

   El patrimonio artístico de la Diputación denota "la sensibilidad" que siempre ha mostrado la institución "con la cultura y los artistas contemporáneos" aragoneses, ha enfatizado la diputada delegada de Cultura, Cristina Palacín.

   En este sentido, el coordinador de Proyectos y Difusión Cultural, Ricardo Centellas, ha remarcado la "constante" labor de conservación de todo el patrimonio que se lleva a cabo por la institución, así como la importancia del coleccionismo como "catalizador de artistas y colecciones de otras instituciones".

   Igualmente, ha resaltado el trabajo del Catedrático Emérito de la Universidad de Zaragoza, Federico Torralba (1913-2012), como "impulsor" de la creación de un Museo de Arte Contemporáneo en el Monasterio de Veruela, "cuando Aragón no tenía ninguno", y como comprador de muchas de las obras de la colección de la DPZ.