HUESCA, 6 Oct. (EUROPA PRESS) -
El grupo del Partido Popular (PP) defenderá en el pleno de la Diputación Provincial de Huesca (DPH), que se celebrará este jueves, dos mociones relativas a la inversión del estado en el Altoaragón, sobre el desdoblamiento de la N-II y los recortes en infraestructuras para la provincia oscense.
Respecto al tramo de carretera que une la localidad oscense de Fraga y Alfajarín (Zaragoza), los populares recuerdan que, en lo que va de año, los accidentes registrados en esta vía se han cobrado siete víctimas mortales e insisten en la necesidad de ofrecer una solución definitiva que conlleve obras y fechas concretas.
Hasta que el desdoblamiento sea una realidad, esta formación política defiende la implantación de un peaje blando para vehículos pesados y, una vez hayan comenzado los trabajos, que se liberalice el peaje de la AP-2 entre Fraga y Zaragoza.
La portavoz popular en la DPH, Sandra González, ha subrayado que "el tramo entre Fraga y Alfajarín es uno de los más conflictivos de la red nacional de carreteras", para exigir que "se de una solución definitiva a esta vía estratégica cuya situación no es adecuada".
Sobre el recorte anunciado por el Ministerio de Fomento en materia de infraestructuras, los populares buscarán el respaldo de la institución provincial a la resolución adoptada por el Senado el pasado mes de septiembre. La propuesta no se limita a buscar el apoyo institucional, sino que expresa la necesidad de unos presupuestos para 2011 corregidos que garanticen las partidas necesarias para ejecutar esas inversiones.
El PP apunta que los Presupuestos Generales del Estado recortan "de forma muy grave" y en un 50 por ciento las inversiones para la provincia de Huesca. En este sentido, indican que las autovías A-21 y A-22, así como el ferrocarril internacional de Canfranc y la Travesía Central, son infraestructuras "necesarias e imprescindibles para el desarrollo y el futuro de Huesca".
También les preocupa que la autovía Huesca-Siétamo, "vital" para unir la A-21, A-22 y A-23, "no se considere básica y fundamental" dada la circulación, seguridad y desarrollo de infraestructuras ya realizadas y que "convertirían a la ciudad de Huesca en un cuello de botella inadmisible".
