ZARAGOZA 1 Sep. (EUROPA PRESS) -
La presidenta del Partido Popular de Aragón, Luisa Fernanda Rudi, manifestó hoy su "escepticismo" en cuanto a que la presidencia española de la Unión Europea (UE), que transcurrirá durante el primer semestre de 2010, pueda servir para potenciar la construcción de la Travesía Central de los Pirineos.
El secretario de Estado para la UE, Diego López Garrido, se reúne hoy con su homólogo francés, Pierre Lellouche, para debatir sobre el paso fronterizo, y en este sentido, Rudi se mostró "escéptica" puesto que "en los cinco años y medio que José Luis Rodríguez Zapatero lleva en la presidencia del Gobierno, este asunto se ha bloqueado".
La presidenta popular de Aragón se refirió hoy al tema durante la presentación de la Escuela de Verano del PP, y explicó que la UE no tiene capacidad para "poner en marcha esta infraestructura", y estima que desde el Gobierno de España se está dando información "sesgada intencionadamente" respecto a esta posibilidad.
Rudi aseguró que gracias al trabajo de la ex ministra del PP y ex vicepresidenta de la Comisión Europea, Loyola de Palacio, el proyecto se introdujo en el mapa de las comunicaciones prioritarias europeas, "esto sirvió para abrir la posibilidad de financiar parte de la infraestructura con fondos europeos", pero en última instancia, "deben ser los gobiernos nacionales, español y francés, los que alcancen un acuerdo".
En este sentido, Luisa Fernanda Rudi matizó que "el Gobierno francés nunca ha estado muy interesado, según se ha visto en las sucesivas cumbres hispano-francesas", puesto que el país galo "tiende a mirar más hacia el este que hacia el sur, porque hay mayor concentración poblacional", dijo.
Por tanto, "el Gobierno español, que es el más interesado, debería presionar", sin embargo, matizó Rudi, "el Ejecutivo central ha bajado el nivel de presión", y le ha dado "prioridad al corredor del mediterráneo".
Antes de concluir dijo que "yo me alegraré de que en la presidencia española se pueda avanzar en el proyecto de la Travesía", pero agregó que "las presidencias de la UE, todas, no sólo la española, se tienen que preocupar de los problemas principales y generales de la Unión".