El consejero de Sanidad del Gobierno de Aragón, José Luis Bancalero. - CORTES DE ARAGÓN
ZARAGOZA 11 Sep. (EUROPA PRESS) -
El Pleno de las Cortes de Aragón ha dado su visto bueno este jueves al proyecto de ley de creación del Instituto de Salud Pública de Aragón y de modificación de la ley autonómica de Salud Pública, gracias al apoyo de PP y PAR y la abstención de la mayor parte de la oposición, que ha compensado el voto en contra de Vox, por lo que seguirá su tramitación parlamentaria.
El consejero de Sanidad del Gobierno de Aragón, José Luis Bancalero, ha sostenido que esta es "una iniciativa que trasciende a las siglas políticas" y que responde a "una necesidad estructural" de la Comunidad autónoma, que ha mantenido durante décadas "esquemas organizativos heredados de la primera mitad del siglo XX" y no ha aplicado ninguna modernización sustancial desde su creación, en 1983.
"Esta situación no nos sitúa en la mejor posición para abordar los nuevos desafíos que se nos presentan en la materia", ha indicado, recordando que "la falta de refuerzo de las estructuras encargadas de salud pública quedó patente durante la pandemia de la covid".
En respuesta, ha continuado, el Gobierno autonómico ha preparado este proyecto de ley "siguiendo la línea de los principales acuerdos y estudios que marcan la hoja de ruta postpandemia", tanto para el Gobierno central, con la creación de la Agencia Estatal de Salud Pública, a la que opta Zaragoza, como en las comunidades.
Bancalero ha apuntado que, mientras otras administraciones han emprendido "reformas ambiciosas", Aragón aún mantiene estructuras "que ya no responden a las exigencias actuales", por lo que la aprobación de este Instituto de Salud Pública es "el primer paso" para reforzar esta gestión.
UNA ESTRUCTURA "COHESIONADA Y EFICIENTE"
En su intervención en la Cámara, ha expuesto que el nuevo Instituto de Salud Pública integrará las funciones de la actual Dirección General de Salud Pública junto con todos los servicios provinciales y territoriales, creando "una estructura cohesionada y eficiente" para que no se produzcan duplicidades.
El consejero ha explicado que esta integración "no es meramente administrativa", sino que pretende potenciar las capacidades de áreas críticas como la vigilancia epidemiológica, la seguridad alimentaria o la promoción de la salud.
Ha finalizado recordando que "la salud pública es un valor fundamental" porque "sin salud pública no hay economía, no hay bienestar, como ha quedado demostrado en múltiples ocasiones y, muy especialmente, durante la pandemia". Para ello, ha asegurado que todas las administraciones españolas están "involucradas y comprometidas" y que el Gobierno de Aragón quiere actuar "desde la máxima colaboración y con la mano tendida" para incluir enmiendas en el texto y que alcance "el mayor consenso político posible".
En el turno de los grupos parlamentarios, la diputada popular Susana Gaspar ha subrayado que la pandemia "nos enseñó que no sólo basta con curar" y que "es necesario prevenir, anticipar y proteger", así como "la importancia estratégica e indispensable que prestan los servicios de salud pública". "Con la creación de este instituto vamos a darle a la salud pública el protagonismo", ha asegurado.
En ese sentido, ha incidido en que la salud pública se enfrenta a "problemas importantes" en la actualidad, citando "falta de visibilidad, recursos limitados o déficit de personal especializado". Ha destacado también que el retorno medio de la inversión en salud pública asciende a 27,20 euros por cada euro invertido.
"El Gobierno central marca el camino con la creación de la Agencia Estatal de Salud Pública, camino que también han seguido otras comunidades autónomas, como Cataluña, País Vasco, Navarra, y que además este modelo va a permitir afianzar la candidatura de Aragón para ser sede de la Agencia Estatal de Salud Pública, una candidatura que cuenta con el respaldo tanto de la sociedad como de la política aragonesa. Este nuevo modelo nos dará capacidad para anticiparnos a las futuras pandemias", ha concluido.
DIFICULTADES PARA CUBRIR PERSONAL
El diputado del PSOE Iván Carpi ha comenzado su intervención reprochando al PP que se dedicara "a torpedear" la aprobación de la ley nacional de creación de la Agencia de Salud Pública, a la que opta Aragón, "por intereses partidistas", y que ahora trate de situar bajo ese paraguas esta ley autonómica. "Su incoherencia de siempre", ha criticado.
En su intervención, ha ahondado en las "serias" dificultades para cubrir plazas de médico de administración sanitaria o de veterinario de mataderos, agravadas además por las diferencias retributivas y de accesibilidad con respecto a profesionales de otros ámbitos.
Entre las opciones, Carpi ha citado que "se podría continuar con la organización actual introduciendo mejoras, se podría crear un instituto o agencia, que es lo que se propone y se podría crear una gerencia de salud pública en el Servicio Aragonés de Salud", y se ha elegido "una mezcla de las dos primeras".
Ha reconocido que la opción elegida acarreará "indudablemente" un aumento presupuestario, pero que es "obvio" que la salud pública requiere una financiación pública. Frente a ello, ha advertido de que el nuevo instituto, si no se permite una revisión de las condiciones, no cumplirá el objetivo de que los recursos humanos sean adaptables a las nuevas necesidades, y ha mostrado dudas también sobre la organización territorial y el control parlamentario sobre el nuevo organismo, por lo que se ha abstenido con el propósito de modificar el texto en su tramitación para avanzar "en un modelo atractivo para los profesionales" y que mejore la salud pública de la ciudadanía.
RECHAZO DE VOX, DUDAS DEL RESTO DE GRUPOS
El único grupo que ha rechazado este punto ha sido Vox, cuyo diputado Santiago Morón ha dicho que es consciente de la necesidad de mejorar la respuesta ante las emergencias sanitarias, pero ha defendido que el "rotundo fracaso" de España en la gestión de la covid-19 no fue "por la inexistencia de 17 institutos de salud pública", sino por "el fracaso absoluto de la llamada cogobernanza entre un Gobierno central con un Ministerio de Sanidad vacío de competencias y recursos humanos, con comités de expertos inexistentes, y unas comunidades autónomas que ni tienen ni tendrán la capacidad ni los recursos suficientes para afrontar por sí solas estas importantes emergencias sanitarias".
La diputada de CHA Isabel Lasobras ha avanzado su abstención porque a la propuesta "le falta profundidad, participación y claridad estratégica", aunque valora "positivamente" esta nueva herramienta, ha considerado que "llega tarde" y adolece de "falta de concreción" y no garantiza una dotación presupuestaria ni personal estable.
Desde Aragón-Teruel Existe, Joaquín Moreno ha mostrado sus dudas sobre "desmantelar la Dirección General de Salud Pública" y dejar "prácticamente reducida a casi su nombre" a la Consejería de Sanidad, por lo que también se ha abstenido.
En representación del Grupo Mixto, Andoni Corrales (Podemos) ha señalado que tiene "serias dudas" de que esta nueva estructura vaya a mejorar las políticas de salud pública, así como del aumento presupuestario, aunque ha apoyado que se aumenten las tasas a los mataderos ya que en Aragón pagan "muchísimo menos" que en otras comunidades vecinas.
El diputado de IU, Álvaro Sanz ha echado en falta "rigor" en el texto y ha instado a ir más allá de la creación de un instituto, algo que hará en la fase de enmiendas, mientras que Alberto Izquierdo (PAR) ha apoyado la propuesta, pero criticando que suponga una subida del 226% de las tasas a los mataderos en un momento en el que el sector "está pasando unos malos momentos", por el anuncio de aranceles por parte de China. En todo caso, ha recalcado que tiene "la mano tendida".