TERUEL 5 May. (EUROPA PRESS) -
El yacimiento celtibérico del Alto Chacón, a poco más de 3 kilómetros de distancia de la ciudad de Teruel, será visitable a partir de este verano verano cuando terminen las obras de consolidación, cercado y protección de este Bien de Interés Cultural que Gobierno de Aragón y Diputación de Teruel (DPT) están llevando a cabo. Estos trabajos llevan aparejada una inversión de 205.8761,84 euros.
Hoy el presidente de la DPT, Ángel Gracia y el director general de Patrimonio, Jaime Vicente Redón, han visitado las obras.
Faltan unos dos meses para que concluyan y los trabajos realizados han evitado la "degradación" de este yacimiento, en el que se empezó a excavar, por parte de los arqueólogos del Museo de Teruel, a finales de los años 60 y principios de los 70, dijo Ángel Gracia, quien explicó que "se instalarán paneles interpretativos para que se conozca el yacimiento y el valle, se establecerá un operativo de visitas y se mejorará el acceso".
La visita a este yacimiento que data del siglo III antes de Cristo al II después de Cristo, en el que también hubo ocupación romana, permitirá conocer los precedentes del poblamiento de Teruel hasta la actualidad.
Vicente Redón destacó que se podrá comprender por qué la ciudad de Teruel se fundó en su ubicación actual, ya que coinciden los criterios estratégicos de vinculación de explotación natural y control de vías de comunicación. "La explotación agrícola y ganadera y el control de las vías de comunicación son los mismos que llevan a ubicar la ciudad de Teruel, independientemente de la leyenda del toro, coinciden en la época celtibérica y medieval cuando se funda Teruel", apostilló.
Es intención del Gobierno de Aragón y de la Diputación continuar con las excavaciones. En el yacimiento, de 13.000 metros cuadrados, de los que sólo 700 metros cuadrados están excavados, se adivina el sistema de fortificación, el foso de la muralla y sus torreones. Ya se han encontrado restos de minería y de fundición y otros materiales que se exponen en el Museo de Teruel. Las futuras excavaciones permitirán conocer cuatro o cinco siglos de historia de este poblado.