Zaragoza.-La Asociación de Productores de Aceite de la Sierra del Moncayo pide la calificación de Denominación de Origen

ZARAGOZA 5 Jun. (EUROPA PRESS) -

La Asociación de Productores de Aceite de la Sierra del Moncayo ha presentado oficialmente al Gobierno de Aragón su solicitud para obtener la calificación de Denominación de Origen para los aceites producidos en las comarcas zaragozanas de Campo de Borja y Tarazona y el Moncayo.

Esta Asociación se constituyó el pasado mes de febrero y está formada por las nueve cooperativas de las Comarcas de Tarazona y el Moncayo y Campo de Borja --Cooperativa de Magallón, Borja, Tabuenca, Pozuelo, Mallén, Ainzón, Fuendejalón, Tarazona y Novallas--, así como por la Almazara de Aceites Ambel S.L. y el Consejo Regulador de la Denominación de Origen (DO) Campo de Borja. Su presidente, y máximo responsable de la cooperativa de Magallón, es Miguel Ángel Lacamara.

Esta nueva entidad nació con el firme propósito de solicitar al Gobierno de Aragón la creación de una Denominación de Origen de Aceite para la zona productora de las tierras aragonesas situadas al abrigo de la Sierra del Moncayo, que cuenta en las fértiles huertas de los Valles del Queiles y Huecha con más de 2.500 hectáreas de olivo tradicional, agrupando más de 4.000 productores y una producción anual media de 5 millones de kilos de oliva, mayoritariamente de la variedad Empeltre.

Existen datos sobre la presencia de olivos en estas tierras desde hace más de 2000 años, en que se generalizaría su cultivo de la mano de la colonización romana, al igual que otros cultivos típicamente mediterráneos, como son el cereal y la vid, apoyado todo ello por la benéfica influencia del "terroir" y del clima de la zona, que han hecho posible la elaboración a lo largo de la historia de un aceite muy valorado por su calidad.

Actualmente el cultivo tradicional del olivo ha empezado a convivir con las nuevas plantaciones, que facilitan la mecanización y sobretodo la recolección, mejoran las técnicas de producción y gestión del cultivo. En estas nuevas plantaciones se alternan las variedades Empeltre y Arbequina.

La calidad de los aceites producidos en las tierras cobijadas por la Sierra del Moncayo es "excelente", considera la Asociación, lo que favorece su comercialización en todo el territorio nacional e incluso su exportación a varios países de Europa y Norteamérica. Las características de los "Empeltres Milenarios" y de los aceites producidos en la Sierra del Moncayo, así como su aceptación comercial en el mercado, indican que el futuro para este cultivo es muy esperanzador.

Esta creciente demanda y el convencimiento de que los aceites de la Sierra del Moncayo merecen la calificación como Denominación de Origen, "por su larga tradición y por el esfuerzo de todos los implicados en su elaboración por conseguir un excelente e inimitable producto", son las razones fundamentales que han impulsado a los productores de aceite de la Sierra del Moncayo a iniciar los trámites ante el Gobierno de Aragón.

El expediente para obtener la calificación como DO se inicia ante el Gobierno de Aragón, quien lo remitirá al Ministerio de Agricultura y éste a la Unión Europea, quién finalmente concede dicha calificación. Para realizar la tramitación con la máxima seguridad y agilidad, se han contratado los servicios de la empresa Global Contec, especializada en la realización de proyectos técnicos y pliegos de condiciones de producto, reglamentación y estudios justificativos, que demostrarán ante la Unión Europea que los "Aceites de la Sierra del Moncayo" merecen la calificación de Denominación de Origen Protegida.

El Consejo Regulador de la DO "Campo de Borja", con su participación como miembro de la Asociación, avala esta iniciativa, ya que los cultivos del olivo y de la vid han convivido durante milenios en estas tierras y han sido unos referentes agroalimentarios de máxima calidad.

OBJETIVO: NOVIEMBRE DE 2008

El proceso para que un producto, una marca determinada, obtenga la calificación de Denominación de Origen, es "complicado", lento y laborioso, explicó el vocal de la Asociación de Productores de Aceite de la Sierra del Moncayo y secretario del Consejo Regulador de la Denominación de Origen Campo de Borja, José Ignacio Gracia, en declaraciones a Europa Press. De hecho, si todos los pasos que debe dar esta nueva asociación siguen el buen camino, no será antes de noviembre de 2008 cuando consigan la calificación de DO.

El camino es ahora "más complicado porque hay que elevar la petición hasta Bruselas. Antes se enviaba la solicitud al Ministerio de Agricultura, con un expediente en el que se explicaban las razones históricas" para realizar la petición, y los informes técnicos que dieran buena cuenta de la calidad del producto en cuestión, pero en la actualidad este proceso debe llegar hasta las instituciones europeas, porque el reconocimiento de una marca como DO "conlleva la publicación de una reglamentación de la denominación de origen en el Boletín Oficial del Estado, y supone la protección a nivel europeo de la zona" en la que se produce, en este caso, el aceite.

Así, entre los trámites que se deben cumplir hay que realizar un pliego explicativo de las características del producto. "Éste debe ser certificable en calidad", es decir, tiene que cumplir las normas de calidad correspondientes; "hay que realizar informes sobre la materia prima y sobre el proceso de elaboración, sobre sus características físico-químicas; y justificar el vínculo histórico de ese producto con la zona a la que pertenece".

Para ello, "se recurre a la bibliografía y a los archivos documentales. Por ejemplo, nosotros buscaremos documentación en los centros de estudios Turiasonense y Borjanos, en los archivos de los Ayuntamientos de Tarazona y Borja", e incluso en los de la Diputación Provincial de Zaragoza y el Gobierno de Aragón. "Es cuestión de profundizar" en los testimonios documentales, en yacimientos y restos arqueológicos. "Hay bastante documentación y hay que dedicarle mucho tiempo", apuntó Gracia.

Además, el producto tiene que tener un "nombre propio", una marca "que se reconozca y que hay que proteger a nivel europeo, para que sea única". En resumen, "hay que hilar muy fino, y al tratarse de una Denominación de Origen que será pequeña o demostramos que nuestro producto es de calidad o no tendremos nada que hacer", aseveró.

No obstante, todos los asociados se han implicado en este proyecto con "mucha ilusión, porque esta Asociación nace con criterios muy claros: dar un producto de calidad". Asimismo, se ha recurrido para cumplir todos los trámites impuestos por la Unión Europea a una empresa --Global Contec-- "que ha trabajado en los últimos años con otras denominaciones de origen y han tenido unos resultados excelentes".

Esta compañía "nos ha propuesto hacer un curso de formación intensivo, que probablemente haremos, y quizás realizaremos también un viaje técnico a la zona de calidad del aceite por excelencia como es la Toscana (Italia)", actividades que complementarían la labor de investigación de los asociados en esta materia.

Así, "en el cronograma que hemos establecido, el trabajo de obtención de toda la documentación dura tres trimestres --nueve meses--, por lo que este proceso se prolongaría a marzo de 2008. Luego tendríamos que presentar la información ante la Unión Europea, y si no hay más exigencias por su parte la cosecha de 2008 --en noviembre--, estaría amparada" por la protección que se otorga a las denominaciones de origen, concluyó José Ignacio Gracia.