Zaragoza.- La campaña 'Motocivismo' incidirá en la seguridad vial para reducir los accidentes de motos y ciclomotores

ZARAGOZA 26 Abr. (EUROPA PRESS) -

'Motocivismo' es el eslogan de una nueva campaña de sensibilización que pone en marcha el Ayuntamiento de Zaragoza, a través de la Policía Local, y el Instituto de Seguridad Vial de la Fundación Mapfre con el objeto de que los ciclomotores y motocicletas extremen la responsabilidad, el respeto y el control cuando circulen por la calles de la ciudad.

La campaña que se pone en marcha en primavera, coincidiendo con la época de uso preferente de estos vehículos, y que se volverá a recordar en septiembre, quiere prestar atención a unos conductores, que por su perfil, y por la características de sus vehículos, afrontan elevados riesgos para su integridad física si no extreman la precaución cuando manejan sus ciclomotores o motocicletas.

El alcalde de Zaragoza, Juan Alberto Belloch, acompañado del primer teniente de alcalde de Presidencia y Policía Local, Carlos Pérez Anadón, y del presidente del Instituto de Seguridad Vial de la Fundación Mapfre, Miguel Múñoz Medina, presentaron en rueda de prensa la campaña de sensibilización 'Motocivismo'.

Belloch señaló que se tomarán dos medidas inmediatamente, entre ellas, la eliminación de los denominados quitamiedos para sustituirlos por otros en forma de 'U' y que afectan a "unos 3.500 metros lineales y 500 metros están dispersos entre 30 y 40 puntos de la ciudad". De este modo, "se van a estudiar si son necesarios o no y se analizará cuál es el mejor modelo". Otra de las medidas inmediatas que llevará a cabo el Consistorio zaragozano será "revisar los pasos de cebras".

En ese sentido, según el alcalde, se pretende "analizar en serio las causas del porcentaje de siniestralidad --50 por ciento de fallecidos en accidentes relacionados con motocicletas o ciclomotores-- para realizar unas medidas y encarar esa siniestralidad con rigor para disminuir los accidentes".

Por su parte, el primer teniente de alcalde, Carlos Pérez Anadón, destacó que se va a incidir en la seguridad vial "para que acabe siendo una verdad real para los ciudadanos", ya que además hay que tener en cuenta que el 46 por ciento de los heridos graves se producen en accidentes con motocicletas o ciclomotores.

El presidente del Instituto de Seguridad Vial de la Fundación Mapfre, Miguel Múñoz Medina, subrayó el lema de la campaña, 'Motocivismo', porque "centra dos puntos importantes, la moto y la educación vial a través del civismo a la hora de conducir". "Es una campaña que lleva a la reflexión a través de la emoción", añadió.

El Ayuntamiento de Zaragoza y el Instituto de Seguridad Vial de la Fundación Mapfre suscribieron un convenio de colaboración en 2004, con una validez de cuatro años, para trabajar de manera conjunta en el ámbito de la seguridad vial. En esta ocasión, el esfuerzo y la atención se va a dirigir a los ciclomotores y a las motocicletas por el elevado número de matriculaciones que se registra en la capital aragonesa en los últimos años y por el aumento de incidentes, vinculados generalmente, a una falta de pericia de los conductores.

MÁS CICLOMOTORES

En Zaragoza hay un parque de ciclomotores y motocicletas de 36.451 unidades, de ellas 19.016 son ciclomotores y 17.435 motocicletas, lo que representa un 11,69 por ciento del parque móvil de la ciudad. La opción personal por desplazarse en estos medios se está incrementando en los últimos años, especialmente en motocicletas --hasta 125 centímetros cúbicos--, desde que una modificación en el Reglamento General de Conductores, realizada en 2004, permitió a los conductores con permiso tipo B y tres años de antigüedad su manejo.

Así, de 2005 a 2006 se registró un aumento de presencia en la calle de motocicletas de un 14 por ciento. Lo mismo ocurre con los ciclomotores, aunque con crecimientos más moderados, que se sitúan en el 2 por ciento.

Esta autorización para las motocicletas, tal y como explicó Anadón, contrasta con la poca habilidad en su uso que han demostrado los nuevos conductores, por lo general, adultos de entre 28 y 45 años. Sus motocicletas no alcanzan velocidades excesivas, pero sí tienen una gran aceleración desde el estado de reposo a los 80 kilómetros por hora, lo que contribuye a hacerles perder con frecuencia la estabilidad.

Los conductores de ciclomotores son personas más jóvenes, generalmente adolescentes que desde los 14 años, con el permiso paterno y unas exiguas clases de 6 a 8 horas, salen a las calles y se incorporan con sus ciclomotores al flujo de tráfico de todos los viales de la ciudad.

El perfil de estos conductores son personas que buscan la velocidad y que no ahorran conductas de riesgo en la conducción. Además, aunque teóricamente los ciclomotores no pueden sobrepasar los 45 kilómetros por hora, son máquinas fáciles de manipular con las que consiguen velocidades de hasta 80 kilómetros por hora, que aumentan la distancia de frenado que necesitan y también el riesgo en el caso de sufrir una caída.

PREVENCIÓN

Las campañas de la Policía Local han logrado que los usuarios lleven de forma generalizada el casco y han intentado frenar las manipulaciones de los topes de velocidad de los ciclomotores.

Aún así, el Área de Policía Local y Presidencia ha manifestado su preocupación por los accidentes que tienen a ciclomotores y motocicletas por protagonistas, ya que son los propios conductores los que actúan como carrocería del vehículo y por lo tanto, ante una colisión o una caída, son la parte más vulnerable y la más expuesta a sufrir heridas de gravedad e incluso la muerte.

De hecho, los datos de siniestralidad de 2006 --donde se ha conseguido un drástico descenso de los muertos por accidente de circulación-- reflejan que de los dos fallecidos que se contabilizaron, uno era conductor de motocicleta.

El recuento de heridos graves registra índices negativos si se comparan las cifras del quinquenio anterior con las del trienio, pero el repunte que se registró el año anterior ha decidido a reforzar las campañas de concienciación para tratar de que nadie perciba este tipo de desplazamientos como una acción en la que no es preciso extremar la precaución.

ELEMENTOS DE LA CAMPAÑA

La campaña que pone en marcha el Ayuntamiento de Zaragoza, a través de la Policía Local y el Instituto de Seguridad Vial de la Fundación Mapfre, lleva por eslogan 'Motocivismo', un término que insiste en la necesidad de que los usuarios de motocicletas y ciclomotores no olviden sus responsabilidades como conductores y las repercusiones personales y para el resto de los ciudadanos que pueden tener sus imprudencias.

Por eso, las pancartas que aparecerán en la calle, los mupis, las perchas publicitarias, que se colgarán en los manillares de estos vehículos, la publicidad trasera que incorporarán los buses urbanos, las de las cabinas de teléfonos, las cuñas de radio y los anuncias en prensa, así como las camisetas que se producirán en esta campaña, insistirán en tres mensajes básicos, el control, la responsabilidad y el respeto.

La campaña informativa tendrá una duración de un mes, que se contabiliza a partir de hoy mismo y volverá a retomarse en septiembre, tras las vacaciones de verano, cuando se ha comprobado que tras el descanso estival se relajan ciertos comportamientos. Paralelamente, la Policía Local de Zaragoza pone en marcha una campaña de vigilancia con patrullas específicas en los turnos de mañana, tarde y noche, que se mantendrá hasta noviembre.