El Principado alerta de que el recorte de la PAC conllevaría eliminar el sistema de derechos históricos

OVIEDO 4 May. (EUROPA PRESS) -

La consejera de Desarrollo Rural y Recursos Naturales, María Jesús Álvarez, ha afirmado que si se llega a aplicar el anunciado recorte la PAC habría que poner "techo" a las ayudas para que lleguen los que "realmente" mantienen la actividad. "Habría que destituir definitivamente el sistema de derechos históricos", ha indicado.

A preguntas de los periodistas después de presentar el logotipo de apoyo a la candidatura de la cultura sidrera a Patrimonio de la Humanidad, la consejera ha destacado que la Comisión Europea ha anunciado un recorte del 5% en Política Agrícola Común (PAC), pero "si profundizas en las cifras son superiores al 10%".

Álvarez ha indicado que el presupuesto de la PAC cada vez tiene "menos peso" y ha mostrado su preocupación porque la Ministra de Agricultura y Pesca, Isabel García Tejerina, dea "por bueno" lo anunciado y asuma las cifras.

"El Gobierno de Rajoy debe pelear por que las cuentas permitan que los agricultores tengas rentas dignas y produzcan alimentos en las condiciones que les exigimos, lo que permitirá mantener las zonas cohesionadas", ha señalado, para añadir que ese es el "principal objetivo" de la PAC y que para alcanzarlo se necesitan unos fondos suficientes.

En ese sentido, sobre cómo afectaría el anunciado recorte de llegar a aprobarse, la consejera ha anunciado que habría que establecer criterios de aplicación distintos, poner "techo" a las ayudas y plantear una PAC que "realmente" llegue a los profesionales.

"Habría que establecer quien puede recibirlas; los que realmente mantienen la actividad agraria y no los jubilados poseedores de la tierra", ha indicado, para añadir que esto supondría destituir "definitivamente" el sistema de derechos históricos.

Por otro lado, ha reivindicado una "racionalización" de la política común porque "no podemos admitir una PAC en la que los estados puedan intervenir porque crearíamos 27 modelos diferentes". Una situación que para Álvarez supondría una competición entre estados "en decremento de las regiones más desfavorecidas".