El arzobispo de Oviedo invita a leer la encíclica del Papa y a preguntarse qué entiende cada uno por amor

Actualizado: miércoles, 15 febrero 2006 19:24

OVIEDO, 15 Feb. (EUROPA PRESS) -

El arzobispo de Oviedo, monseñor Carlos Osoro, ha invitado a los cristianos a leer la primera encíclica de Benedicto XVI, 'Deus Caritas Est', y a preguntarse, entre otras cuestiones, qué entiende cada uno por amor.

El prelado, mediante carta pastoral titulada 'Vivir el amor, para poder llevar la luz de Dios al mundo', explica que el texto se articula en dos partes. De la primera "sería importante que nos hiciésemos estas preguntas, dándoles a su vez respuesta", dice monseñor Osoro y enumera: ¿Qué entiendo yo por amor?, ¿Qué diferencia y qué unidad existe entre eros y ágape?, ¿Dónde está la novedad de la fe en la Biblia?, ¿Contemplamos a Jesucristo y lo experimentamos como amor encarnado? y ¿Cómo está unido en tu vida el amor a Dios y al prójimo?

A continuación, el prelado indica que después de la "lectura y meditación" de la segunda parte el lector se puede preguntar: ¿Percibimos cómo se manifiesta la caridad de la Iglesia en sus múltiples testimonios como expresión del amor de Dios?, ¿Dónde situamos la caridad como tarea de la Iglesia?, ¿Descubrimos las diferencias y las coincidencias entre justicia y caridad? o ¿Cómo colaborar en la entrega del amor entre entidades eclesiales y estatales?.

Además, pide que se plantee ¿Cómo debe ser el perfil específico de la actividad caritativa de la Iglesia?, si es ante todo, y simplemente, la respuesta a una necesidad inmediata en una determinada situación, si es independiente de partidos e ideologías, si es la actualización, aquí y ahora, del amor que toda persona necesita siempre o si es un amor gratuito que no se practica para conseguir otras finalidades y objetivos puramente sociales.

Finalmente, el obispo plantea la cuestión acerca de cómo se vive la cercanía a Cáritas Diocesana "como institución que tiene el ministerio episcopal para cumplir el programa expuesto en el libro de los Hechos de los Apóstoles".

RELACIÓN DEL HOMBRE CON DIOS.

Según el obispo de Oviedo, el texto no sólo trata de expresar quién es el Dios de los cristianos, sino también lo que significa "el hombre en su relación con Dios".

Osoro destaca de la encíclica el "énfasis" que Su Santidad hace de la palabra 'amor' y apela a la necesidad de volver a los orígenes de este término. "Hoy la palabra amor está tan deslucida, tan ajada y, sin embargo, resulta ser un término fundamental, expresión de la realidad primordial; por eso, no podemos abandonarla, sino retomarla, purificarla y darle el esplendor originario a fin de que pueda iluminar plenamente nuestra vida", indica Osoro en su pastoral.

Otro de los aspectos sobre los que incide el prelado asturiano, es la "centralidad de la fe en Dios". "La fe no es una simple teoría que uno puede, a conveniencia, aceptar o arrinconar. La fe es algo muy concreto, es el criterio fundamental que decide nuestro estilo de vida y de relación con Dios, los hombres y el mundo", interpreta Carlos Osoro.

La encíclica muestra la "humanidad de la fe", según Osoro, quien destaca la cita que realiza el Papa del libro del Cantar de los Cantares que recuerda que "el descubrimiento del amor es el descubrimiento del otro". "En esta singularidad, está la originalidad de la fe cristiana", sostiene Osoro.

En este sentido, Osoro interpreta que "la Iglesia no puede ser más que una comunidad convocada por el amor y una comunidad de amor". "El amor es la misma vida de la Iglesia y es la cotidianeidad del vivir cristiano", dice.

"Como ejemplo de ese vivir cotidiano, el Santo Padre cita varias veces a la Madre Teresa de Calcuta y la presenta como referente del vivir cristiano. Un amor que no es una idea abstracta, sino que se concreta en gestos y hechos reales, y que buscan la justicia superándola", añade en su pastoral el obispo.

La encíclica afirma, además, "que el amor para los cristianos se convierte no solamente en una obligación, sino en una decisión de vida, en una elección de libertad de quien sabe renunciar a sí mismo en vista del otro", comenta Osoro.

Osoro finaliza su reflexión trasladando a los cristianos asturianos la invitación del Papa de "obtener de Dios la luz y la fuerza del amor que vence la oscuridad y todos los egoísmos presentes en el mundo". "La mejor defensa de Dios y del hombre es y radica en el amor", concluye Osoro.