'Churruca' afirma que la sentencia demuestra que fue "un auténtico montaje policial"

Actualizado: lunes, 24 octubre 2016 19:36

Concepción Trabado sostiene que hubo elementos de prueba que convierten en "imposible" la versión de los policías

GIJÓN, 24 Oct. (EUROPA PRES) -

El ex líder de IU Xixón Jesús Montes Estrada 'Churruca', uno de los nueve procesados de los altercados del Teatro Jovellanos que ha salido absuelto según la sentencia dada a conocer este lunes, ha sostenido, en declaraciones a Europa Press, que el fallo judicial del Tribunal Superior de Justicia de Asturias (TSJA) pone de manifiesto que todo el proceso fue "un auténtico montaje policial".

'Churruca', que ha bendecido que en este caso "la Justicia ha hecho justicia", ha recordado que en España hay más de 500 personas, entre sindicalistas, defensores de los derechos humanos o activistas sociales que han pasado por procesos similares y que, en muchos casos, están en la cárcel porque el tribunal que les juzgó no atendió tantas pruebas como en su caso.

Entre otras cosas, y con referencia al "montaje policial" que según él refleja la sentencia, ha llamado la atención sobre el atestado policial que se redactó más de una hora antes de que ocurrieran los hechos aquel 24 de julio de 2014, cuando se produjo una carga policial frente a un grupo de manifestantes que protestaban por la actuación de un grupo israelí frente al Teatro Jovellanos.

A esto ha sumado que se añadieran posteriormente fotos de periódicos y se pusieran número a una serie de personas, lo que ha tildado de "medio cacería" de gente por razones que él desconoce. "Se va a por un número determinado de gente como se pudo haber ido a por otro", ha apuntado.

Ha destacado, eso sí, que más de 20 meses después hay un montón de gente que puede respirar "con cierto grado de satisfacción". Dicho esto, ha dejado claro que ahora toca revisar la sentencia milimétricamente para ver si se opera en consecuencia.

Para él, "hay determinadas actitudes de impunidad que son intolerables y que no se pueden dejar correr sin más", ha agregado, para volver a reiterar que fue un montaje "total y absoluto". Ha insistido, asimismo, en que algo "incomprensible" de que ocurra en un Estado de Derecho y que quede impune.

A este respecto, se ha mostrado "absolutamente convencido" de que si no hubiera presentado él denuncia en la Comisaría por las lesiones causadas por la Policía no se hubiera presentado por los agentes lesionados "absolutamente nada". A su juicio, fue "una manera de cubrirse las espaldas".

Ahora, una vez conocida la sentencia, que no es firme al caber recurso de casación ante el Tribunal Supremo, ha confesado que estaba más preocupado por lo que pudiera pasar a otros de los encausados, incluido su hijo quien, según él, solo le había ayudado a levantarle del suelo cuando resultó herido. Ha incidido, con relación a ello, en lo que le hubiera supuesto a su hijo que le hubieran inhabilitado para trabajar en la Administración pública.

También ha sido crítico con la actitud de la fiscal durante el juicio, "situándose por encima de todo el mundo", según él, y lo que a él le pareció "una vendetta de mala calidad" contra el diputado de Podemos Enrique López. Además, ha opinado que el papel de la Fiscalía debería ser extraer la verdad y no alinearse con parte de la acusación. Al tiempo, ha considerado una "chapuza indecente" el que alguien sellara la cerradura del portal de la fiscal.

IRREGULARIDADES POLICIALES

Por su parte, la abogada de Asturias y Barcelona Concepción Trabado, que representó a 'Churruca' y a otros tres acusados, el hijo de este, Pablo Montes, Manuel Fernández Fernández y Misael González Suárez, ha insistido también, declaraciones a Europa Press, en la idea del montaje policial y en que estudiarán la sentencia pormenorizadamente para decidir las siguientes actuaciones a seguir por sus clientes.

Trabado ha mostrado satisfecha tanto por la sentencia como por los razonamientos que la Sala tuvo en cuenta para dictar el fallo, y que coinciden en su mayoría con lo expuesto por ella en sus conclusiones finales. Ha destacado, asimismo, que la sentencia es "absolutamente contundente y de una pureza jurídica prácticamente impecable".

Entre otras cosas, ha aludido a un conjunto de "irregularidades", desde que el atestado lo elaborada la Brigada de Información, cuando no suele ser su cometido, a que encima se hiciera más de una hora antes de que sucedieran los hechos a que los agentes lesionados no acudieran al hospital hasta después de que 'Churruca' fuera a poner la denuncia a la Policía.

Sobre esto último, ha llamado la atención sobre que el que se supone que estaba más grave, con una rotura en una costilla, entrara el último, siendo el primero un agente con una contusión en un dedo. Para ella, ha habido, igualmente, elementos de prueba que convierten en "imposible" la versión de los policías.

Como ejemplo, ha citado el caso de que uno de los procesados, de 70 años, supuestamente causó la rotura de la costilla de una patada a un agente de 1,80 metros de altura, cuando para ello tendría que haber levantado la pierna 180 grados, ha destacado la letrada. "Hay cosas improbables y cosas imposibles", ha remarcado.

También ha visto "incoherente" que en principio las lesiones de los agentes figurara en los informes policiales que eran leves y luego más graves. A su parecer, el Tribunal tuvo en cuenta fundamentalmente las irregularidades, la incoherencia y la falta de veracidad del atestado, según la abogada.

Para ella, el fondo del asunto se trata en una actuación policial dirigida políticamente contra personas muy concretas y que "curiosamente", ha ironizado, pertenecen a dos partidos políticos y un sindicato. "Fue una orden política ejecutada por la Policía", ha sostenido.

Sobre la parte de la sentencia en la que el Tribunal recoge que el derecho de manifestación "no puede amparar las situaciones de violencia física" y habla de los insultos "graves" a los agentes de Policía que acudieron a "normalizar la situación" ante el teatro gijonés" tras los incidentes violentos enjuiciados, ha opinado que fue una respuesta ante una actuación policial "absolutamente desproporcionada".

En este sentido, ha dicho que no justifica que se les llamara "policías asesinos", pero lo ha enmarcado en un contexto en el que la gente que estaba concentrada allí se pudo sentir "agredida" tras la carga policial.

DUDAS RAZONABLES

La sentencia, cuyo ponente ha sido el magistrado José Ignacio Pérez Villamil, explica que la absolución "se debe a la existencia de dudas razonables sobre su participación delictiva en los hechos". Los hechos fueron juzgados este mes de octubre y los nueve acusados enfrentaban diversas penas por un delito de atentado y otro de lesiones padecidas por "cinco de los agentes de la Policía Nacional" que intervinieron en un altercado que se produjo el día de la protesta.

El texto del Tribunal recoge que no puede sostenerse como prueba de cargo "el peculiar e irregular reconocimiento fotográfico" con el que los agentes de Policía identificaron a los 9 acusados. Esta prueba esgrimida por la Fiscalía y las acusaciones particulares "no se practicó con las garantías necesarias", señala la sentencia.

Según el magistrado, esta identificación realizada en sede policial a través de "reconocimientos fotográficos" genera "serias dudas sobre el cuándo (fecha del reconocimiento); el cómo se hizo (por separado o juntos); los criterios utilizados en la selección de las fotografías y quién hizo la selección".